En uno de sus momentos más bajos desde que llegó a la presidencia de la Comunidad de Madrid, cuestionada por su gestión de las residencias de ancianos durante la pandemia del coronavirus, Isabel Díaz Ayuso presentó ayer, lunes, el proyecto de ampliación de la zona de Valdebevbas-Ifema en el que se va a construir un nuevo hospital de emergencias, al estilo del que se improvisó en los pabellones del recinto de Ifema a principios de la pandemia. 

Sin embargo, este anuncio no va a aplacar el nivel de la crítica a Ayuso. Es más, es muy posible que lo aumente: varios sindicatos de la Mesa Sectorial de Sanidad han tildado de "ocurrencia", "medida precipitada" y "cortina de humo" la construcción de un nuevo hospital de emergencias en la Comunidad de Madrid, ante lo cual abogan por destinar esa inversión anunciada a la rehabilitación del antiguo hospital del Puerta del Hierro o la contratación de más personal sanitario.

Por ejemplo, el secretario general del sindicato médico Amyts, Julián Ezquerra, ha señalado que con la inversión de 50 millones de euros prevista por la Comunidad de Madrid para el nuevo hospital de emergencias se podrían contratar 800 médicos y ha asegurado que "este dinero tendía bastante mejor destino si se dedicase a esto", ante el "déficit tremendo de plantilla" y "los problemas que hay para cubrir plazas de médicos en atención primaria".

Por el contrario, ha considerado que destinar esa cantidad a la construcción de un hospital prefabricado "tiene poca utilidad por no decir que prácticamente ninguna", según ha manifestado en declaraciones a Europa Press, al tiempo que ha advertido de los posibles sobrecostes, con los que vaticina que el importe definitivo duplique la inversión inicial prevista.

"A mí me parece que es una medida precipitada que carece de todo sentido, puesto que se trata de invertir en un hospital prefabricado que va a tener una utilización exclusivamente pensada para una situación de crisis como la que hemos vivido, cuando por ese importe se podría rehabilitar el hospital Puerta de Hierro antiguo, se podría terminar de poner en funcionamiento la cuarta torre del Infanta Sofía... Hay estructuras físicas mucho mejores y que tendrían una posibilidad de utilización en el tiempo de forma muchísimo más segura", ha señalado. Así, ha afirmado que "es una medida con carácter puramente de autobombo".

Por su parte, el secretario de Sanidad de la Federación de empleados de servicios públicos de UGT de Madrid, Julián Ordoñez, ha dicho que "es una ocurrencia más y una forma de desviar la atención".

A su juicio, "Ifema fue un espectacular escaparate publicitario, pero su rendimiento, tanto desde el punto de vista de la eficacia como de la eficiencia es muy dudoso" y "con el hospital de pandemias pasa más o menos lo mismo".

Además, ha agregado que "sería interesante saber quién lo va a construir y qué actores de la colaboración público-privada se van a ver beneficiados".

"Lo que tiene que hacer la comunidad de Madrid, la administración sanitaria, nuestra consejería, es dotar de recursos suficientes a los centros que ya existen, volver a habilitar las camas que se eliminaron en los últimos años, cumplir con los pliegos de condiciones de los hospitales concesionados par sus ampliaciones y en definitiva utilizar el dinero público en dotar al sistema público", ha expuesto.

Desde CCOO de Madrid, su secretario general, Jaime Cedrún, ha afirmado que el hospital de emergencias, cuyo proyecto dio a conocer este lunes la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, "es una cortina de humo que viene a intentar tapar las vergüenzas de una Consejería de Sanidad total y absolutamente cuestionada".

En este sentido, ha señalado que el departamento que lidera Enrique Ruiz Escudero se encuentra cuestionado "desde el punto de vista sindical, desde el punto de vista del sector, desde el punto de vista político, tanto como consecuencia de su ineficacia a la hora de proceder a las contrataciones y dotar a la atención primaria, a la salud publica y a la atención hospitalaria de los recursos que necesita, como desde el punto de vista del escándalo que hay montado en estos momentos como consecuencia de sus instrucciones de cara a la hospitalalización de los residentes".

"Pero además creemos que es un anuncio que, tal y como está planteado, a la espera de conocer los aspectos concretos que salgan de la decisión del Consejo de Gobierno, nos huele a una nueva oportunidad de negocio para el sector sanitario privado de esta región con el dinero que les transfiere el sector público", ha agregado Cedrún.

Según CCOO, "hay unas necesidades urgentes de respuesta por parte del Gobierno regional en materia de sanidad, en materia de salud pública, en materia de lucha contra el contagio" y "anuncios o iniciativas de este tipo no vienen justamente ni a calmar ni desde luego vienen a responder a las necesidades actuales".