El gasto en viajes de los senadores con cargo al presupuesto de la Cámara Alta ha ascendido a 869.538 euros durante los tres primeros meses de 2024: ello supone 58.320 euros más que el año pasado a estas alturas y el récord en los últimos nueve años, desde que estos datos se registran oficialmente a través del portal de transparencia del Senado. Más concretamente, las cifras figuran en el apartado relativo al régimen económico de los parlamentarios, donde se pueden visualizar los gastos específicos de los senadores desde el 2015. 

Así, durante el primer trimestre de 2024, el total de gasto reflejado es de 792.322 euros, divididos entre los viajes parlamentarios, políticos y oficiales de los senadores. No obstante, la facturación total de este período es de 869.538 euros, puesto que aquí también se incluyen los gastos de gestión, de cancelación y de cambio de billetes. 

Estos desplazamientos, cuyos gastos corren a cargo de la Cámara Alta, incluyen viajes en medios de transporte colectivo (avión, tren, autobús o barco) para el desempeño de su actividad parlamentaria, de cara a poder realizar actividades de naturaleza política, sectorial o de representación institucional. También se incluyen viajes oficiales que se realicen en representación del Senado. 

Para que los senadores puedan desplazarse por el territorio nacional, la cámara entrega una Tarjeta-Taxi con un crédito máximo anual de 3.000 euros, válida para cubrir sus desplazamientos en la Comunidad de Madrid. En caso del uso del propio automóvil, se abonan 0,25 euros por kilómetro, así como, en su caso, los importes de los peajes de autopistas. 

Nuevo récord de gasto en viajes de los senadores

Los gastos de los senadores en viajes durante estos tres primeros meses de 2024 han supuesto el récord desde que se empezaron a hacer públicos estos datos, hace ya nueve años. Además, el coste de los desplazamientos se ha incrementado más de un 30% con respecto al primer trimestre de 2022, cuando la cifra relativa al gasto derivada de los viajes fue de 618.859 euros. 

En 2020, cuando estalló la pandemia de la covid-19 y se cerró casi por completo la actividad presencial en la Cámara Alta, los gastos fueron de 586.743,35 euros. En 2021, cuando aún había ciertas restricciones, los costes durante los tres primeros meses ascendieron a 486.851 euros.