"No hay comparación posible". Así responden tanto en Moncloa como en Ferraz sobre los perfiles internacionales de Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo. En las filas socialistas consideran que la proyección europea del actual presidente del Gobierno debería ser otro factor más a la hora de decidir el resultado de las elecciones generales del 23 de julio. 

Más en un contexto como el actual. Primero, por la propia situación en la Unión Europea, con una guerra en Ucrania lejos todavía de finalizar. Y, segundo, por la relevancia de la presidencia española del Consejo de la UE que comenzó el pasado sábado con una visita de Sánchez a Kiev. 

Fuentes del Ejecutivo resaltan que en las filas del Partido Popular (PP) no hay nadie, ni mucho menos Feijóo, con una figura de referencia internacional como la que tiene hoy en día Sánchez. En teoría, apuntan en Moncloa, ese dirigente debería ser Esteban González Pons. Pero, "lo único que hace es tratar de boicotear". 

La actitud de los populares al respecto a la presidencia europea está siendo "desleal", según inciden en el Gobierno de Sánchez. Todo en connivencia con el Partido Popular Europeo (PPE) que lidera Manfred Weber. 

Desde el PP han acusado en  reiteradas ocasiones a Sánchez de ocultar información relativa a la presidencia europea. Algo que ha sido afeado desde las filas socialistas. Recuerdan que la información sobre las sedes y las actividades a realizar es pública desde el año pasado. 

También que el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, acudió el pasado mes de abril a Bruselas para reunirse con todos los grupos políticos con el objetivo de explicarles las líneas generales de la presidencia española. Weber les dio plantón. Algo que, según fuentes gubernamentales, escandalizó incluso a eurodiputados del PP.

El pistoletazo de salida del semestre no ha frenado las críticas de los populares. Este mismo lunes el mencionado Pons acusaba a Sánchez de usar electoralmente la presidencia del Consejo de la UE. Y destacaba la ausencia de varios comisarios europeos a la cita en Madrid. 

De manera pública, tanto la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, como el propio Sánchez, desligaron el éxito de este período del resultado electoral. Eso sí, la dirigente conservadora alemana, del mismo partido que Feijóo, dejó un mensaje de alerta sobre el crecimiento de los "extremismos", aunque citó también a los "extremismos" de izquierda. 

Está por ver si la ciudadanía valora o no este tipo de cuestiones internacionales y el papel que ha jugado Sánchez estos últimos años. En las filas socialistas se muestran cautos al respecto pero sí destacan que factores diferenciales de este tipo deberían tenerse más en cuenta en los tiempos que corren. 

"Feijóo tiene un problema en política internacional, y no es solo por su inglés. Es una cuestión de desconocimiento. No puede ser la persona que defienda nuestros intereses en Europa y en el mundo. Jamás podrá igualar la hoja de servicios de Pedro Sánchez. Es una batalla que tiene perdida, y por eso ni la comenta", destacan fuentes de la dirección del PSOE en Ferraz.

Lo que sí está claro es que Sánchez tendrá que interrumpir su campaña oficial como candidato del PSOE al menos un par de días. El 17 y 18 de julio se celebra en Bruselas una histórica cumbre entre la UE y la CELAC. El presidente se ha volcado en reforzar los lazos europeos con los países de América Latina. Sobre la mesa está cerrar diferentes acuerdos comerciales con el Mercosur, México o Chile. 

Los pactos con Vox se miran desde Bruselas

La posible entrada en el Gobierno de España de la ultraderecha, representada por Vox, genera preocupación en Bruselas, según destacan en Moncloa. Pese a la garantía de estabilidad mostrada por Von der Leyen y Sánchez, hay algunas cuestiones, especialmente las relacionadas con el cambio climático o el antieuropeísmo que generan inquietud. 

"Los pactos con Vox están generando cierto descrédito hacia Feijóo en Bruselas", señalan fuentes gubernamentales. Incluso Sánchez dejó un mensaje parecido el pasado viernes en la capital belga en la rueda de prensa que ofreció tras el Consejo. 

"He de reconocer que hay distintos líderes que se han mostrado sorprendidos y contrariados con la involución de ciertos debates en los que España había sido referente y ejemplo hasta el 28 de mayo. Ahora lamentablemente estamos siendo un contraejemplo", dijo Sánchez. 

Para el PSOE, "España no puede sumarse a Hungría o Polonia en esos postulados". "Somos un país europeísta. Pero Feijóo está dispuesto a traicionar ese mismo sentimiento del PP, con tal de ocupar el sillón", sentencian en Ferraz.