Sánchez afronta la renovación de RTVE y el techo de gasto con los apoyos en el aire

El Gobierno de Pedro Sánchez afronta este viernes dos votaciones decisivas para su proyecto político, y horas antes del pleno, no tenía garantizado los apoyos suficientes para que salga adelante el techo de gasto y la senda de estabilidad; mientras cruza los dedos para que no haya más "errores" en la votación para elegir a la nueva administradora única de RTVE.

En principio, la elección de Rosa María Mateo como máxima responsable del ente público debería ser ya aprobada definitivamente, porque pese a las advertencias de Carles Puigdemont, los diputado de PDeCAT siguen mostrándose decididos a votar a favor, como ya hicieron el pasado miércoles en la última votación fallida.

Por tanto, la única duda es que haya 176 diputados que metan la papeleta correcta y no se repitan los errores de la pasada semana, que frustraron la elección del presidente de RTVE y de sus consejeros. Aunque Unidos Podemos insinuó que la equivocación podría ser intencionada, en el Grupo Socialista se tiene la total seguridad de que la votación saldrá adelante y se pondrá fin a este largo culebrón.

Menos claro está la aprobación del techo de gasto y la senda de estabilidad porque el Grupo Socialista no tiene asegurado los votos de Unidos Podemos, PDeCAT y ERC, y sí tiene la certeza de que PP y Ciudadanos votarán en contra.

Unidos Podemos ha mostrado su total oposición al techo de gasto que considera "totalmente insuficiente", y más cercano a lo que propondría el PP que a su propuesta, que estaba más cercana al doble del 4,4% que propone el Ejecutivo. Sin embargo, el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, declaró a la Cadena Ser que su formación no quiere elecciones y no va a jugar a desestabilizar al Gobierno.

El Grupo Socialista aseguró que Unidos Podemos no le ha informado de que votarán en contra y que siguen hablando y negociando con la formación de Pablo iglesias para obtener su apoyo.

En la misma situación de incertidumbre está el Gobierno con el voto de PDeCAT, que ya advirtió hace unos días de que su apoyo al techo de gasto no iba "a salir gratis". También se está negociando con los nacionalistas catalanes para buscar su voto favorable, que puede estar vinculado a que el Ejecutivo levante la mano con Catalunya en la reducción del déficit.

ERC, por su parte, ha decidido no desvelar su voto hasta el día del pleno y, aunque ha mostrado su disconformidad con el techo de gasto, admite que la senda de estabilidad daría a las comunidades la oportunidad de tener más gasto. En concreto, para Catalunya supondría cerca de 500 millones de euros mas.

No obstante, aunque se apruebe la senda de estabilidad -el techo de gasto no requiere el visto bueno de las Cámaras ya que esa potestad le corresponde al Gobierno- el anunciado veto del PP en el Senado hará decaer la senda de estabilidad, y el Gobierno deberá presentar otra en el plazo de un mes.

La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, anunció el miércoles que el Gobierno "encontrará soluciones" para superar este escollo, cambiando la ley orgánica. La duda que queda es si habrá tiempo para hacerlo en este ejercicio o se utilizará un Real Decreto para frenar el veto.

En el caso de que el Gobierno opte por el Real Decreto, tampoco tiene garantizado que salga adelante su proyecto, ya que éste podría ser frenada por la Mesa del Congreso, donde tienen mayoría PP y Ciudadanos.