El Ministerio de Trabajo ha lanzado una nueva propuesta para la reducción de la jornada laboral en España. El documento, presentado por el gabinete de Yolanda Díaz a la mesa de diálogo de este lunes, ofrece una mayor capacidad a las empresas para redistribuir irregularmente la jornada laboral, de forma que así puedan disponer de más tiempo de adaptación al recorte.

La ministra ha subrayado en diferentes ocasiones que la reducción de la jornada laboral podría traer múltiples beneficios, como una mayor conciliación entre la vida personal y profesional, una disminución del estrés laboral y una posible reducción del desempleo al repartir mejor las horas de trabajo disponibles.

El diálogo entre el Ministerio de Trabajo, los sindicatos y la patronal ha sido constante. Según ha señalado tras la reunión de la mesa el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, la vocación del Gobierno es alcanzar un acuerdo "con todas las partes", incluyendo a las patronales CEOE y Cepyme.

De esta forma, se han planteado diversas fórmulas para hacer viable la reducción, incluyendo ahora la flexibilidad horaria y la posibilidad de adaptar las jornadas a las necesidades específicas de cada sector y empresa. Esta medida, ha explicado, se ha complementado con otra muy importante para el Gobierno, incorporar un agravante para infracciones relacionadas con el impacto del tiempo de trabajo en la seguridad y salud de los trabajadores.

Desde los sindicatos, han mostrado su disposición a negociar los plazos y las condiciones de esta reducción, aunque no quieren que "se demore en exceso la entrada en vigor". Unai Sordo, secretario general de CCOO, ha señalado que, aunque el objetivo final es reducir la jornada laboral, es crucial definir un calendario y unas condiciones realistas que permitan la implementación gradual de estas medidas. La intención es alcanzar un acuerdo antes del verano, lo que subraya la urgencia para todas las partes involucradas.

Por su parte, los empresarios se inclinan por alcanzar un consenso que les permita mantener la competitividad. En este sentido, la patronal ha insistido en la necesidad de que cualquier cambio en la jornada laboral esté acompañado de medidas que aseguren la sostenibilidad económica de las empresas.

Las negociaciones continuarán en las próximas semanas con la esperanza de que se pueda concretar el deseado acuerdo antes del parón de verano. Si se lograra, España podría convertirse en un referente en la implementación de este modelo de políticas laborales innovadoras.