Queda en el aire si Junts per Catalunya y PNV tendrán grupo propio en el Senado. La Mesa de la Cámara Alta, con mayoría conservadora, ha supeditado su decisión a un informe solicitado a los letrados de la institución. Así lo ha expuesto el popular Javier Maroto, vicepresidente del Senado, en una comparecencia tras la reunión que ha mantenido la Mesa en el mediodía del martes 29 de agosto. 

Maroto ha recalcado que la situación es diferente a la del Congreso de los Diputados, donde el PP votó en contra de que JxCat y Esquerra accedieran a ese grupo propio porque observó unas irregularidades que constituían, tal y como expresaron fuentes del partido, "un fraude parlamentario y electoral". En cualquier caso, la mayoría progresista de la Mesa no lo vio igual y votó a favor. "En el Senado", ha concretado Maroto, "existen dudas con la fórmula que han propuesto algunos grupos, por lo que se ha pospuesto la decisión".

El líder popular ha anunciado que su formación decidirá la postura que toma finalmente a la luz de lo que señale el informe y que será en la próxima reunión de la Mesa cuando dará o no luz verde a esos grupos. Hace valer, así, su mayoría en el Senado.

Lo que pone en tela de juicio el Partido Popular es la fórmula con la que JxCat y el PNV, pero también el grupo de Izquierda Confederal pretenden obtener el grupo. A ojos del PP podría chocar con el reglamento de la Cámara. Maroto ha insistido en que no cuestiona el préstamo de senadores, sino el hecho de que algunos grupos tengan "más senadores prestado que propios". 

 Ninguno de esos tres grupos cumpliría, de partida, con el único requisito que exige la Cámara Alta (a diferencia del Congreso, que exige varios) para conformar un grupo propio: que cuente con, al menos, diez senadores.

La posición del Partido Popular fijada por Javier Maroto este martes cobra sentido, especialmente, en el caso del de la Izquierda Confederal, donde conviven tres senadores de partidos integrados en Sumar: Más Madrid, Compromís y el senador de la coalición PSOE-Sumar en Ibiza/Formentera, tal y como informa Europa Press, además del representante de la Asociación Socialista Gomera. 

En ese caso, a la espera de que el Parlamento de Navarra designe a Uxue Barkos senadora y se inscriba, también, en este grupo, el PSOE sí tendría que prestar seis representantes de los diez del grupo. Más de la mitad.

Pero la cosa cambia en los otros dos casos. Es cierto que Junts cuenta solo con tres senadores, muy lejos de los diez que se precisan, por lo que necesitaría hasta siete para poder formar un grupo propio. Pero también lo es, tal y como aseguran fuentes conocedoras de las negociaciones, que Coalición Canaria, la Asociación Herreña y BNG formarían parte del grupo de JxCat, por lo que sumarían, en total, seis, con lo que los prestados por parte del PSOE serían solo cuatro. En el caso del PNV, que logró cinco representantes, el PSOE tendría que prestar otros cinco. 

Según esos números, en ninguno de los dos casos se cumpliría el escenario que dibuja el Partido Popular. Los senadores que presta el PSOE a ambos grupos en ningún caso superan la mitad. 

Durante la reunión de este martes sí se han ratificado, en cambio, otros tres grupos propios: el del PSOE, el del Partido Popular y el grupo de Izquierda por las Independencia, en el que confluyen ERC y EH Bildu. El informe de los letrados, y la intepretación que de él haga el PP, determinarán si los otros tres grupos obtienen la misma condición.