Pablo Casado PPEl PP de Casado rescata a 'aznaristas' y 'aguirristas' olvidados en la era Rajoy

Pablo Casado no solo ha resucitado políticamente a José María Aznar, también ha recuperado su discurso y su círculo. El actual presidente del partido reivindica la herencia del hombre que le empleó como director de Gabinete en FAES entre 2009 y 2012, y que incluso ha vuelto a pedir el voto para el PP en la Convención Nacional del partido del pasado fin de semana, tras renunciar a la presidencia de honor de la formación en el año 2016 por sus discrepancias con Mariano Rajoy. Casado, que  también fue uno de los protegidos de Esperanza Aguirre, ha depositado su confianza política en personas que trabajaron con ambos líderes en el pasado. 

Javier Fernández-Lasquetty

Javier Ferández-Lasquetty ha sido uno de los fichajes 'estrella' del líder del PP, que se reincorporó a las filas 'populares' como jefe de gabinete el pasado mes de diciembre. Su trabajo es elaborar el discurso, la estrategia y la agenda a seguir por Casado, con el fin de asegurar una posición política que le defina.

Lasquetty fue uno de los hombres de confianza de José María Aznar y después de Esperanza Aguirre, con la que ocupó las consejerías de Inmigración y posteriormente de Sanidad. Como responsable de Sanidad, destacó por ser el precursor de parte de la externalización de los hospitales públicos madrileños y precisamente, abandonó su cargo, cuando el Tribunal Superior de Justicia de Madrid suspendió el proceso de forma cautelar, tras meses de tensión con profesionales y manifestaciones periódicas de la conocida como la 'marea blanca'.

Las discrepancias de Lasquetty con Rajoy son indiscutibles; el nuevo jefe de gabinete de Casado firmó un artículo en abril de 2018 bajo el título de Lo conseguiste, Mariano, en el que afirmaba que Mariano Rajoy "invitó a los liberales y a los conservadores a que nos marcháramos del Partido Popular" cuando pronunció "uno de los discursos más destructivos de la historia contemporánea del centro-derecha español". Para Lasquetty, Rajoy es un "un mal recuerdo" y representa una época de "fracaso ideológicamente borroso".

Isabel Benjumea

Isabel Benjumea es otra de las nuevas caras de Casado en su gabinete; la número dos de Lasquetty fue becaria de FAES, la organización que preside Aznar, y es creadora del think thank ultraconservador Floridablanca, una organización "liberal conservadora" que se dedica al análisis, el debate y la reflexión de la realidad y la actualidad política española. Desde esta organización, Benjumea defendió que el PP abriera un proceso de primarias para elegir a los futuros líderes y candidatos, que hasta entonces se proponían mediante un pequeño grupo de compromisarios. 

Benjumea también se ha mostrado crítica con Rajoy y pidió abiertamente su marcha. Es partidaria de "volver a los valores esenciales" del partido, que pasan por reivindicar el centro-derecha liberal y recuperar a los cuatro millones de votantes que los conservadores se han dejado por el camino, que han ido a parar a formaciones como Ciudadanos o Vox. "El PP no está dando la batalla de las ideas. Ya no se tiene un ideario claro, identificable, coherente. Los que antes se identificaban con nosotros ahora se sienten huérfanos", aseguraba Benjumea en calidad de militante en una entrevista previa a la marcha de Rajoy.

Manuel Pizarro

Manuel Pizarro, expresidente de Endesa, fue uno de los 'fichajes' de Mariano Rajoy para las elecciones generales de 2008 que tenía su plaza asegurada en las Cortes al ir de número dos en lista por Madrid. Pizarro ambicionaba la posición de ministro de economía, pero el PP perdió las elecciones y abandonó el escaño en 2010. 

La íntima amistad de Pizarro con Aznar le llevó, años más tarde, a ser número dos de la Fundación Faes, sustituyendo a María Dolores de Cospedal en calidad de vicepresidente. Esto ocurrió precisamente cuando Aznar dejó la presidencia de honor del PP, momento que aprovechó para reorganizar la Fundación y desvincularse del que fuera su partido. 

Actualmente el expresidente de Endesa es uno de los asesores más cercanos a Casado — apuntan fuentes 'populares que Casado le tentó con ser candidato al ayuntamiento de Madrid, aunque Pizarro rechazó la oferta— ambos coinciden en su defensa de la economía de libre mercado y en una vuelta a los valores esenciales del centro-derecha. 

Carlos Aragonés

El que fuera jefe de gabinete de Aznar durante sus ocho años al frente del Gobierno, Carlos Aragonés, pasó a un segundo plano político con la llegada de Rajoy a la presidencia. Ahora es senador y uno principales ideólogos de Casado, a quien apoyó en las primarias, por ser la opción "más valida" si se pensaba "en el porvenir más que en lo inmediato".

Tras la victoria del PP en las elecciones de 1996, Aznar lo nombró director del gabinete de la presidencia de Gobierno, con rango de Secretario de Estado, cargo que ocupó hasta 2004, cuando entró el el Congreso como diputado por Madrid en ese mismo año. El conservador declaró al Congreso que asesoraba a una editorial próxima al Opus.

Adolfo Suárez Illana

Adolfo Suárez Illana, hijo del histórico presidente del Gobierno, se afilió al PP en 2002, cuando Aznar era presidente, y además de formar parte del Comité Ejecutivo del partido, fue el candidato a la presidencia de la Junta de Castilla-La Mancha en las elecciones autonómicas de mayo de 2003, pero fue derrotado por José Bono, lo cual implicó su retirada de la política, hasta ahora.

Suárez Illana es la persona elegida por Casado para presidir la nueva fundación del PP, Concordia y Libertad; se ha encargado, entre otras cuestiones, de la organización de la Convención Nacional y según fuentes 'populares' es en encargado de preparar un documento alternativo para derogar la Ley de Memoria Histórica. Tomó posesión de su cargo en la fundación el pasado mes de octubre, aunque todavía se desconocen detalles de la misma.

Con este movimiento, Casado le asesta un 'golpe' a Rivera, pues Suárez padre es uno de los símbolos más recurrentes del líder de Ciudadanos, y lo utiliza como 'voz de la transición' para cargar contra la memoria histórica. 

Daniel Lacalle

Daniel Lacalle, conocido por ser el icono liberal de Esperanza Aguirre y de la derecha más partidaria del ultraliberalismo, se incorporó como responsable del área económica de la Fundación Concordia y Libertad, que preside Suárez Illana, en octubre de 2018. Con este fichaje, Casado busca dar ese "giro liberal al PP" incentivando políticas de libre mercado.

La histórica lideresa del PP anunció en 2015 que Lacalle iría en sus listas para Ayuntamiento de Madrid y después que lo fichaba como asesor, pero esta alianza nunca llegó. A ambos les unía una fuerte amistad, y compartían ideario político, pero Lacalle se quedó fuera de tener un papel en el Gobierno de la capital. 

El gurú económico de Casado tuvo su papel en la Convención Nacional, en la que participó mediante un debate sobre economía y pensiones. Allí, Lacalle le pidió al PP no "caer en la trampa socialdemócrata que lleva al estancamiento y a un mayor desempleo" y apostar "por las personas, no por las tribus".

Miguel Ángel Rodríguez

Miguel Ángel Rodríguez, quien fuera portavoz y secretario de Estado de Comunicación del expresidente del Gobierno José María Aznar es el último fichaje del PP de Casado. Será el encargado de asesorar en la campaña de la actual portavoz del Partido Popular y candidata a la Presidencia regional, Isabel Díaz Ayuso.

Aznar confió a Rodríguez el cargo de secretario de Estado para la Comunicación y portavoz del Gobierno en su primer gabinete en 1996, donde estuvo dos años hasta que en 1998, anunció que renunciaba por motivos personales, cuando fue sustituido por Josep Piqué. Ahora ha vuelto al PP de la mano de Díaz Ayuso, la apuesta de Casado para la Comunidad de Madrid, exbecaria de FAES, que ha estado a las órdenes de Esperanza Aguirre y de Cristina Cifuentes.