Cargas policialesLa Policía justifica el uso de las pelotas de goma el 1-O porque se sintieron acorralados

Cuatro agentes de la Policía Nacional investigados por su intervención para impedir el 1-O han justificado el uso de pelotas de goma en un instituto de Barcelona en que los manifestantes les amenazaban con acorralarlos, como hicieron a la Guardia Civil en el registro de la conselleria de Economía el 20-S.

Según han informado fuentes jurídicas, ante el titular del juzgado de instrucción número 7 de Barcelona han declarado hoy tres escopeteros de la Policía Nacional y un cuarto agente que ejercía de asistente de los mandos sobre el terreno, investigados por su intervención en el instituto Ramon Llull de Barcelona, donde un votante perdió la visión de un ojo al recibir el impacto de una pelota de goma.

Ante el juez, los agentes han defendido hoy la necesidad de utilizar las pelotas de goma porque, según han sostenido, los grupos que se concentraron a las puertas de esta escuela de Barcelona les advertían de que iban a asediarlos y acorralarlos como hicieron con la Guardia Civil durante el registro a la conselleria de Economía el 20 de septiembre de 2017.

Uno de los agentes ha afirmado además haberse sentido "secuestrado" cuando quedó en el interior de este centro educativo mientras decenas de personas se concentraban a las puertas para impedir el acceso de las fuerzas de seguridad al local de votación.

Según han aducido los policías, la situación en este centro educativo justificaba el disparo de balas de goma, dada la "hostilidad" de los concentrados, que aseguran lanzaban material de obra, adoquines y conos contra los antidisturbios.

Los tres escopeteros que han declarado hoy se han situado en la acera contraria a la que cayó Roger Español, el votante al que una pelota de goma golpeó el ojo, con lo que su defensa intenta demostrar que no pudieron ser ellos quienes dispararon la bala que hirió al manifestante.

El cuarto policía nacional que ha declarado por su actuación en ese instituto ha negado que propinara una patada a un manifestante y ha alegado que se limitó a hacer un movimiento "defensivo" con la pierna para cubrirse los genitales ante una posible agresión.

Para el próximo jueves, el juez había citado a declarar a Roger Español, en la doble condición de investigado y perjudicado, para aclarar las circunstancias en que fue herido en el ojo por una pelota de goma.

No obstante, la declaración ha quedado suspendida, después de que así lo haya solicitado el abogado de la Generalitat, a cuya petición se han sumado el resto de las partes, ante las dificultades de movilidad que se prevén para el próximo viernes, coincidiendo con la reunión del Consejo de Ministros en Barcelona.

Ante el juez instructor ha declarado también hoy el único agente de la brigada de información de la Policía Nacional investigado por la actuación del 1-O, una unidad que tenía la misión de intervenir las urnas y el material electoral del referéndum unilateral, mientras los antidisturbios facilitaban su trabajo.

El agente, que está imputado por propinar una patada a un manifestante en la Escola Pia de Sant Antoni, ha afirmado hoy que se limitó a "apartar" a una persona que se interponía en su camino, cuando se disponía a abandonar el centro de votación.

Según su versión, se había caído al suelo segundos antes del incidente por el que ha sido imputado, por lo que usó la pierna para apartar al manifestante "con rapidez", ante el temor de quedar relegado respecto al resto de agentes de su grupo.

Otro de los policías que hoy ha comparecido ante el juez es un oficial que ha sido imputado por su intervención en la escuela Prosperitat de Barcelona, después de que un votante lo denunciara por haberle desgarrado el pabellón auditivo cuando lo arrastró por el suelo para apartarlo, agarrándole de la oreja y la camisa.

Este policía, el único de los que han declarado que ha aceptado contestar a todas las partes, ha negado que fuera él quien arrastró al votante por la oreja, dado que según su versión es que en todo momento se encontraba en otro lugar del recinto, y ha añadido que no vio heridos ni personas sangrando en la escuela.

El agente, que ha negado que los manifestantes fueran violentos, ha explicado que recibía instrucciones de su superior por radio, pero que desconoce quién coordinaba la intervención de la Policía Nacional en Barcelona.