"Ni Picasso podría vivir en la Merced": el alquiler turístico satura el centro de Málaga

La manifestación convocada por el movimiento Málaga para vivir el próximo 9 de noviembre, que se prevé multitudinaria, no es fruto de un capricho. La ciudad ha alcanzado unos niveles de saturación en algunas zonas tras décadas de Gobierno del PP de Francisco de la Torre que hacen, a juicio de los portavoces de la plataforma, "inaccesibles" algunas zonas de la ciudad. 

Una pancarta que se pudo ver el pasado 29 de junio en la multitudinaria manifestación de entonces, la que dio el pistoletazo de salida a la plataforma Málaga para vivir, resumía así la situación: "Ni Picasso podría vivir en la Merced". La Merced es un barrio del centro de Málaga. Y Picasso es el pintor de fama mundial nacido en Málaga.

Estos son los datos, sacados de fuentes oficiales, que aporta la plataforma, que revelan que los pisos turísticos han saturado el centro de la ciudad. "Málaga es hoy una de las ciudades con los alquileres más altos de España y la segunda ciudad con el suelo más caro de España; solo en los tres primeros trimestres de 2024 ha subido un 20%". El precio medio rondaba ya los 1.200 euros por 80 metros cuadrados este verano, la quinta ciudad más cara del país, solo por detrás de Barcelona, Madrid, San Sebastián, y Palma de Mallorca. 

Málaga para vivir compara, en su análisis, el precio de los alquileres con las condiciones laborales en la ciudad y llega a la conclusión de que "siguen disminuyendo". Se reducen "los derechos y los salarios a niveles insostenibles". Además, añaden, "la turistificación y una economía de servicios, castigan y precarizan aún más la vida de miles de personas trabajadoras y los beneficios se quedan en manos de unos pocos que se aprovechan y explotan al resto".

"El precio medio del metro cuadrado en alquiler en Málaga es hoy de 14,5 euros, según los datos del portal Idealista", expresa la plataforma. "En el distrito Centro es de 16,2 euros. Así, alquilar un apartamento de 80 metros cuesta ya 1.300 euros, si lo encuentras, porque la oferta es muy baja y cara", expone el movimiento.

"Si lo comparamos con el salario medio en Málaga, que es de 1.200 euros al mes en neto, según los datos del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía, esto convierte la vivienda en algo inaccesible para cualquiera", agregan.

"Pero eso es solo la media, la realidad es mucho más cruda ya que la situación para la mayor parte de trabajadores y trabajadoras precarias del sector servicios que sostiene este modelo de especulación turística, no alcanza ni de lejos estas cifras medias y subsisten en condiciones de explotación y miseria. Muchas se ven obligadas a compartir vivienda para poder mantenerse en la ciudad. Nos expulsan de la ciudad, pero a la vez nos necesitan para servirles en sus negocios".

Turistificación y gran engaño

"En el Centro Histórico, cerca del 50% de las viviendas son ya viviendas de uso turístico o apartamentos turísticos, según los datos del INE y de la Agencia Tributaria. En zonas —prosigue la plataforma— como el entorno de la Plaza de la Merced, el 70% de las viviendas son apartamentos turísticos, según el INE".

"Además, el 78% de las viviendas de uso turístico eran antes viviendas residenciales; un 7% promocional nueva, y un 12% estaban vacías, según los datos del Instituto de Estudios Urbanos y Sociales", agrega el movimiento en un comunicado.

"En Málaga se ha pasado de 25.000 viviendas y apartamentos de uso turístico en 2018 a casi 73.000 en 2024, según los datos del Instituto de Estudios Urbanos y Sociales", remacha la plataforma.

Para el movimiento Málaga para Vivir, las causas de toda esta situación se encuentran en "la especulación y el urbanismo depredador, que están degradando el medioambiente y destruyendo las infraestructuras naturales básicas del territorio".

"Solo por poner un ejemplo —añaden— en la Costa del Sol está la mayor concentración de campos de golf del mundo; solo los 75 de Málaga —de los 109 que hay en Andalucía— consumen la misma agua al año que una población de un 600.000 de habitantes, según los datos del ingeniero agrónomo Santiago Martín Barajas".

Hay, para la plataforma, un problema "muy claro": "Se ha producido un gran engaño a quienes habitan la ciudad, construyendo un modelo de ciudad especulativa y excluyente".