Una peluca y un cambio de imagen radical: así trató la pareja de Ayuso de esquivar a los periodistas

Alberto González Amador, empresario y pareja de Isabel Díaz Ayuso, estaba convocado en la mañana de este lunes para declarar por dos presuntos delitos de fraude fiscal y uno de falsedad documental. El acusado ha llegado con un cambio radical de aspecto, debido a un corte de pelo para no ser reconocido ante los medios, y varios testigos han afirmado haberle visto con una peluca en la mano. 

El empresario estaba citado a las 10.00 horas en el Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid, investigado por defraudar supuestamente 350.951 euros a Hacienda entre 2020 y 2021. González Amador ha llegado con el pelo muy corto y con una aspecto físico distinto al de sus últimas imágenes, para pasar desapercibido ante la prensa. 

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Tiempo después, el investigado ha abandonado la sala de vistas acompañado por sus abogados y a la carrera. Varios testigos han afirmado haberle visto con una peluca en la mano, que se habría puesto en un ascensor para no ser reconocido por los medios. 

Aunque se esperaba que su salida fuese inminente, por el aplazamiento de la cita por parte de la jueza, se ha alargado hasta casi las 14.00 horas, cuando ha salido acompañado de su abogada. Con un móvil en la oreja y la mano tapándose la cara ha intentado evitar a los medios  hasta su llegada a un taxi. 

La suspensión de las declaraciones de los acusados se debe a que uno de los citados no había recibido la notificación, ni tampoco se había podido tramitar una videoconferencia prevista para este martes en los juzgados de Sevilla.

Presunto fraude fiscal

La investigación sobre González Amador se centra, por una parte, en los supuestos indicios delictivos de los hechos relativos al Impuesto de Sociedades correspondientes a los ejercicios de los años 2020 y 2021.

Por otra parte, el novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid se enfrenta a un presunto delito de falsedad en documento mercantil al haber presentado unas facturas que no se corresponden con servicios realmente prestados, aportadas con la finalidad de reducir la cuota tributaria a satisfacer.

Datos tachados y folios en negro

El pasado abril, el concejal del PSOE Antonio Giraldo se personó en la Junta de Chamberí con un técnico para revisar la documentación disponible sobre la reforma del piso en el que viven Isabel Diaz Ayuso y Alberto González Amador. 

Los socialistas aseguraron que el expediente que recibió Giraldo estaba "mutilado", con folios prácticamente en negro y distintos nombres, direcciones y otros datos ocultos. Por lo tanto, el PSOE presentó una denuncia en la Oficina Municipal contra el Fraude por entender que se está vulnerando el derecho a la información de "manera premeditada" para ocultar datos. 

Asimismo, el PSOE también requirió al organismo que comprobara si efectivamente existió, o no, un comportamiento fraudulento y corrupto por parte de las autoridades municipales.