La ministra de Agricultura se desvincula "completamente" de la trama de sobornos en Argelia

Fuentes del Ministerio de Agricultura consultadas por Público han desvinculado "completamente" a la ministra, Isabel García Tejerina, de la trama de sobornos en Argelia en la que está involucrada Fertial, sociedad mixta del grupo Villar Mir, y de la que Tejerina fue consejera.

La Audiencia Nacional ha abierto una investigación a Fertiberia tras quedar acreditado que en 2005 esta empresa sobornó con 1,9 millones de euros a conseguidores y militares argelinos para poder fundar en Argelia otra empresa llamada Fertial, la sociedad mixta del grupo Villar Mir y la empresa pública argelina Asmidal, para que se encargase del proyecto de la fábrica de amoníaco de Arzew, informa la cadena Ser. 

La noticia adquiere relevancia porque García Tejerina fue consejera de Fertial. Tejerina ingresó en el Grupo Villar Mir en septiembre de 2004 y fue consejera de Fertial entre agosto de 2005 y febrero de 2012, cuando fue nombrada secretaria general de Agricultura y Alimentación. 

La cadena Ser ha preguntado a través de un cuestionario a la ministra por este asunto. Ella se ha desvinculado por completo: asegura que "en ningún momento tuvo contacto alguno con las personas bajo sospecha", a las que, añade, ni siquiera conoce. Añade que fue nombrada a propuesta del empresario Juan Miguel Villar Mir, presidente del grupo, quien está siendo investigado por el supuesto pago de comisiones tanto en el caso de la financiación ilegal del PP, como en el caso Lezo. 

La ministra dice que Villar Mir la contrató por su capacitación profesional y que no cobraba por formar parte del consejo de administración de Fertial, la sociedad bajo sospecha. 

A preguntas de la Ser, Tejerina afirma que "el Ministerio de Agricultura no abrirá investigación alguna a Fertiberia", sospechosa de corrupción en transacción económica internacional, porque “no tiene ninguna competencia” en este tipo de actuaciones". 

La investigación de Fertial es una pieza separada del caso por el que permanecen imputados los exdiputados del PP Gustavo de Arístegui y Pedro Gómez de la Serna.