Con una Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) asentada, según la gran mayoría de los sondeos, en la tercera posición en la carrera hacia el 12 de mayo, Oriol Junqueras se ha subido la mañana de este martes a lo alto de la montaña de Montjuïc, en la ciudad de Barcelona, para animar a sus votantes a "girar las encuestas". En ERC saben que hay una parte importante del electorado que todavía está indeciso y, por tanto, consideran cruciales los últimos días de campaña.

Quieren evitar que el 12 de mayo sea un tête à tête entre Salvador Illa y Carles Puigdemont. "No recuerdo ningunas elecciones en las que las encuestas hayan dicho que íbamos a ganar", ha subrayado el presidente de la formación, rodeado de varias figuras importantes para los republicanos como la expresidenta del Parlament de Catalunya Carme Forcadell; la vicepresidenta de la Generalitat, Laura Vilagrà, o el diputado en el Congreso Francesc Marc Álvaro.

Junqueras ha hablado bajo "el sol primaveral" de la ciudad condal sobre la "pluralidad y la diversidad" de Catalunya y ha asegurado que su partido es el que mejor las representa. Ese ha sido el hilo conductor de su intervención, la única de la mañana.

Preguntado por los pactos, ha jugado precisamente con esa idea. "El socio preferente de ERC es la ciudadanía de Catalunya", ha remarcado sin despejar la incógnita acerca de con quién preferiría acordar un Gobierno Esquerra tras un 12M que, a todas luces, obligará a Junqueras, Pere Aragonès y compañía a entenderse o bien con Illa, o bien con Puigdemont si quieren evitar un bloqueo electoral.

Junqueras ha insistido en que "ERC quiere parecerse a la gente a la que quiere representar" y ha puesto como ejemplo de esa voluntad la confluencia en las filas de la formación de gente de distintas sensibilidades políticas —ha puesto como ejemplos Iniciativa, Podemos o el PSC— o de personas que llegan a Esquerra "desde el mundo sindical, el universitario o del periodismo".

PSC y PP, en el mismo saco

El líder de ERC ha salpicado los prolegómenos del acto, fuera de cámara, con algunos apuntes sobre la historia de Barcelona, aprovechando las vistas privilegiadas del Mirador de l'Alcalde, donde ERC ha citado a los medios. Ha aprovechado para recordar, entre otras cosas, la teoría más aceptada y difundida sobre el origen del nombre del monte Montjuïc, "Monte de los judíos"; o las distintas dudas que tuvieron los romanos al elegir el enclave ciudad de Barcelona.

Ya metido en materia, ha tenido que contestar preguntas sobre el apoyo que Alejandro Fernández, candidato del PP, ha brindado públicamente a Salvador Illa para alejar el independentismo de las instituciones. Junqueras ha asegurado que no es algo que le sorprenda: "PP y PSOE han pactado en muchas ocasiones y muchas veces en contra de las clases trabajadoras de este país".

El tiempo aprieta y las encuestas no sonríen a ERC. Sí les dan, en cambio, la llave del Gobierno, aunque ni Junqueras ni Aragonès quieren oír hablar de ello. Por el momento, se concentran en "girar las encuestas" y en tratar de movilizar a su electorado. El final de la campaña se acerca y los partidos se ven obligados ya a esprintar.