La izquierda consolida una lenta remontada en las encuestas para gobernar y Feijóo sigue atado a Vox

El escenario demoscópico de octubre es prácticamente idéntico al de septiembre, por lo que se empieza a apreciar la consolidación de algunas tendencias que recogen las encuestas. Según el último estudio de Key Data para Público, las proyecciones de los principales partidos apenas han variado en las últimas semanas, y las posibles fórmulas de gobierno siguen siendo las mismas.

Por un lado, se aprecia una lenta recuperación del Gobierno de coalición, que parece haber revertido la tendencia a la baja que había sufrido en los últimos meses y que crece de manera muy leve, de momento. Por otro, la derecha sigue conservando su ventaja sobre la izquierda, pero Feijóo ve cómo su crecimiento se estanca y continúa necesitando para gobernar a una ultraderecha que viene acusando desgaste desde hace unos meses.

El PP sigue siendo la primera fuerza en las encuestas, con una ventaja importante sobre los socialistas tanto en estimación de voto como en estimación de escaños. Los conservadores se mantienen por encima del 30% de estimación (en concreto un 31,8%), lo que les valdría alrededor de 135 escaños.

Según apunta la directora técnica de Key Data, Paz Álvarez, "el Partido Popular sigue liderando la intención de voto al Congreso de los diputados, manteniendo la tendencia al alza que tiene desde la llegada de Feijóo, si bien la curva se suaviza y el crecimiento es mucho menor que el observado hasta el verano".

El segundo partido en las encuestas es el PSOE, que comienza a recuperar fuelle tras la caída experimentada en los últimos meses. Los de Pedro Sánchez obtienen una estimación de voto del 25,1%, lo que les valdría alrededor de 97 escaños. Se trata de su  mejor estimación desde el mes de marzo, teniendo en cuenta que en julio tocaron suelo demoscópico con el 24%.

"Por segundo mes consecutivo, el PSOE invierte la tendencia a la baja que se observaba en las encuestas desde la primavera pasada, coincidiendo con el cambio de liderazgo en el Partido Popular. La nueva de estrategia de Pedro Sánchez acercándose más al electorado y presentando claramente batalla al PP de Feijóo, y a un estado de opinión que le estaba haciendo perder votos y escaños en las encuestas, parece estar dando resultados", explica Álvarez.

La tercera fuerza continúa siendo Vox, que es el único de los cuatro principales partidos del arco parlamentario que baja en estimación de voto y en escaños. La ultraderecha obtiene una estimación del 14,8%, con lo que obtendrían en torno a 48 escaños (cuatro menos que los que tienen actualmente en el Congreso de los Diputados).

"El partido de Santiago Abascal sigue sufriendo las consecuencias del crecimiento del partido conservador, cuyo auge desde mayo ha ido paralelo a la interrupción del avance de Vox. Aun así, se mantiene como tercera fuerza", apunta la directora técnica de Key Data.

Al igual que el PSOE, el segundo partido del Gobierno, Unidas Podemos, también mantiene la tendencia al alza en las encuestas que se apreció en septiembre. Con una estimación de voto del 10,6%, el espacio confederal obtendría alrededor de 26 escaños.

"El crecimiento del PSOE no es en perjuicio de Unidas Podemos, que se mantiene por encima del 10% de intención de voto, con 26 escaños. Los dos socios de gobierno están por debajo de sus resultados en las últimas elecciones generales, pero las elecciones están aún lejos y gobernar en tiempos de pandemia, guerra en Europa y crisis económica desgasta", asegura Álvarez.

En un escenario de bloques ideológicos, aunque es primera fuerza con una ventaja considerable sobre los socialistas, el PP sigue muy atado a Vox en cualquier fórmula de gobierno. Sus proyecciones están muy alejadas de los 176 escaños necesarios para lograr una investidura, y Feijóo solo podría alcanzar esta mayoría sumando con la ultraderecha (con lo que se obtendrían 183 escaños, una mayoría muy amplia).

El Gobierno de coalición suma en esta encuesta 123 escaños, casi los mismos que tiene el PSOE en solitario en la actualidad (120), y con los partidos del denominado bloque de la investidura apenas se podrían superar los 135 que obtendría el PP por sí solo.