La Abogacía de la Comunidad Autónoma de Baleares ha presentado este viernes ante Fiscalía una denuncia por crímenes contra la humanidad por 52 asesinatos cometidos en Mallorca entre 1936 y 1937, durante la Guerra Civil.

La denuncia deriva de las exhumaciones realizadas en las fosas de Sant Joan en 2014 -en la que tres vecinos de Maria de la Salut fueron identificados como las víctimas- y de Porreres en 2016 -en la que se exhumaron 49 cuerpos con evidencias de muerte violenta por armas de fuego-.

La consellera de Cultura, Participación y Deportes, Fanny Tur, anunció la interposición de esta denuncia a mediados de enero y en febrero el Consell de Govern acordó incorporar los tres casos de Maria de la Salut. Ahora la denuncia se ha hecho efectiva.

En un escrito de 12 páginas acompañado de material documental, la Abogacía informa de que "se han constatado indicios de haberse presuntamente cometido crímenes contra la humanidad en Mallorca, entre los meses de agosto de 1936 y marzo de 1937".

Estos indicios fueron descubiertos al abrir diferentes fosas de la Guerra Civil en Mallorca. La primera fue en junio de 2014 en el cementerio de San Juan y se identificaron los cuerpos de tres vecinos de Maria de la Salut que "desaparecieron y fueron asesinados en el contexto de la represión durante la Guerra Civil española".

Más tarde, del 2 al 20 de noviembre de 2016 se llevó a cabo en el cementerio de Porreres la exhumación de otra serie de fosas donde se creía que había un número importante de víctimas de la Guerra Civil.

En este sentido, la denuncia del Govern -dirigida al fiscal jefe de Baleares, Bartomeu Barceló- reseña los resultados del estudio realizado por un equipo de especialistas forenses dirigido por el profesor de la Universidad del País Vasco Francisco Etxebarria.

Según reseña este estudio citado en el escrito del Govern, se encontraron un total de nueve fosas comunes. Fueron excavadas en su totalidad a excepción de una, que se cree que puede contener al menos seis cuerpos.

Se encontraron 55 cuerpos en total pero sólo se pudieron extraer 49, de los que se han identificado 14. Según el informe, se trató de entierros colectivos de víctimas procedentes de las prisiones de Ca'n Mir y Bellver.

La Abogacía de la Comunidad recalca que los cadáveres exhumados presentan uno o más orificios provocados por proyectiles, ya sea en el cráneo o en otras partes del cuerpo.

Con esto, el Govern cumple con la ley autonómica de Memoria Histórica, que señala que "por el carácter masivo o sistemático que presente el hallazgo de restos humanos con signos de violencia en las fosas de la Guerra Civil y de la dictadura franquista, el Govern, directamente o a través de sus servicios jurídicos, denunciará ante Fiscalía la existencia de la comisión de posibles crímenes contra la humanidad de naturaleza imprescriptible y efectos permanentes".