"Pedimos a las grandes empresas lo mismo que los consumidores que están soportando el azote de la crisis y que esta situación no derive en sobresueldos de sus máximos directivos ni engorde sus beneficios", ha señalado este sábado el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ante el Comité Federal de su partido, convocado para ratificar los cambios anunciados a lo largo de la semana en el seno de la formación.

Estas palabras han sido pronunciadas en el marco del anuncio que el líder socialista ha hecho ante los suyos: los partidos que sostienen el Gobierno de coalición, PSOE y Unidas Podemos, presentarán la próxima semana en el Congreso la proposición de ley para crear un impuesto extraordinario a las energéticas y a la banca.

El presidente ya avanzó en el debate del estado de la nación celebrado la semana pasada en la Cámara Baja dicha propuesta, con la que se pretende recaudar cerca de 7.000 millones de euros en dos años. Si bien, Sánchez ha ido un paso más allá y ha aclarado que el Ejecutivo prohibirá que tanto la banca como las grandes eléctricas puedan repercutir los costes sobre los ciudadanos.

Ante las críticas vertidas por la derecha a estos nuevos impuestos y su posible repercusión, el secretario general del PSOE ha recalcado que "en ese texto vamos a prohibir que las compañías puedan trasladar los costes a la clase media trabajadora en España".

"Es momento de definirse, de decir si se está o no con la clase media trabajadora, con el reparto justo de los costes de la crisis, y ante estos impuestos, que existen en países avanzados con gobiernos conservadores, la derecha española ha anunciado su oposición, es verdad que no nos sorprende pero nosotros lo tenemos claro", ha lanzado.

En este sentido, sobre le discurso del presidente del Gobierno ante el Comité Federal del PSOE, fuentes de Podemos han valorado su mensaje "en positivo". También, han aprovechado la oportunidad para volver recordar que "los próximos Presupuestos serán la prueba del algodón del cambio de rumbo del Gobierno" que vienen reclamando sus socios desde hace meses, tras la debacle de la izquierdas en las tres últimas elecciones autonómicas.

Asimismo, el portavoz del grupo morado en el Congreso, Pablo Echenique, ha admitido a través de un mensaje en Twitter que "es una gran noticia que el PSOE haya aceptado" su propuesta de incluir un delito específico en el Código Penal por repercusión artificial a los precios finales del aumento de impuestos. "Es un atentado contra el interés general que no se puede permitir", ha añadido el dirigente morado.