Enfado en la cúpula judicial por las críticas de Junts a los magistrados del Tribunal Supremo
Francisco Marín Castán, presidente del Alto Tribunal, cancela una reunión con el ministro Félix Bolaños, mientras que Vicente Guilarte, presidente suplente del CGPJ, anuncia que tomará "medidas" para proteger la independencia de los jueces.
Madrid--Actualizado a
El Poder Judicial está muy enfadado tras las críticas de Junts a varios jueces que intervinieron en algún momento en el proceso judicial contra los dirigentes independentistas catalanes. El presidente del Tribunal Supremo considera "inadmisible" la declaración que hizo este pasado martes en el Congreso Miriam Nogueras, portavoz parlamentaria de Junts.
Nogueras lanzó una serie de acusaciones contra jueces del Tribunal Supremo, entre los que citó a Manuel Marchena, Pablo Llarena y Carmen Lamela, aunque también criticó al expresidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) Carlos Lesmes o a la magistrada del Tribunal Constitucional Concepción Espejel, muy vinculada al PP.
En concreto, Nogueras cargó contra una "justicia politizada" y afirmó que "en un país normalizado estos personajes [en relación a los jueces] serían cesados y juzgados". También utilizó el calificativo "indecentes" para referirse a estos magistrados.
El presidente del Supremo, Francisco Marín Castán, ha emitido un comunicado al respecto este miércoles en el que dice: "El ataque personal en el Parlamento al anterior presidente del Tribunal Supremo, a un presidente de Sala y a dos magistrados del tribunal carece
de precedentes y no se corresponde con los requisitos mínimos de la
separación de poderes en un Estado de Derecho".
Y es que las palabras de Nogueras han sentado muy mal en la cúpula judicial, que no disimula su malestar. Para empezar, el propio Francisco Marín Castán ha cancelado su reunión con Félix Bolaños, ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, prevista para la mañana de este miércoles para tratar otras cuestiones. Fuentes del Tribunal Supremo informaban en un principio de que Castán suspendía el encuentro con Bolaños "por razones sobrevenidas", sin dar más detalles ni fijar una nueva fecha.
Sin embargo, entre las razones de fondo para cancelar la reunión aparecen las críticas de Junts a los jueces –tal como ha confirmado el comunicado posterior de Castán–, pese a que antes de las acusaciones de Nogueras en el Congreso, Bolaños ya había dejado claro en el Senado que las sentencias impuestas a independentistas catalanes por el procés no eran casos de lawfare.
Fuentes del Ministerio de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes han anunciado posteriormente que Bolaños y Marín Castán han hablado telefónicamente y han acordado verse el próximo 19 de diciembre en la sede del Tribunal Supremo.
Poco después de la cancelación del encuentro, el presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Vicente Guilarte, ha afirmado, en otra muestra evidente de enfado, que el señalamiento a jueces por parte de Junts en el Congreso es "inadmisible" y ha anunciado que "se adoptarán todas las medidas necesarias previstas por el ordenamiento jurídico para proteger su independencia".
Bolaños ha tenido que salir a apagar el incendio provocado por Junts. El ministro de Justicia ha sido rotundo: "Voy a defender a los jueces para que hagan su trabajo con independencia, les voy a defender de los ataques y descalificaciones de los partidos independentistas pero también de la larguísima mano del PP que intenta siempre influir en el Poder Judicial".
Bolaños ya se había referido a los jueces a primera hora de este miércoles en el Congreso tras una interpelación urgente del PP. "Voy a trabajar por el prestigio de los jueces de cualquier ataque", respondía al portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, durante la interpelación.
Renovación de magistrados
Bolaños y Marín Castán tenían previsto analizar este miércoles la situación del Tribunal Supremo, que en la actualidad tiene 23 plazas vacantes pendientes de cubrir al encontrase en funciones el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y no poder realizar nuevos nombramientos.
Esta situación ha provocado que se hayan superado ya las 80 plazas pendientes de cubrir en la cúpula del Poder Judicial, es decir, además de las del Tribunal Supremo otras vacantes existentes en la Audiencia Nacional, tribunales superiores de justicia de las comunidades autónomas y audiencias provinciales.
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