Prácticamente alcanzado el ecuador de la campaña electoral madrileña, los datos ofrecidos por las últimas encuestas dibujan un escenario en que la candidata más fuerte, Isabel Díaz Ayuso, está siendo capaz de conservar la fuerza con la que irrumpió en estas elecciones (convocadas por ella misma), mientras su principal competir, el PSOE de Ángel Gabilondo, parece desinflarse a marchas forzadas.

Según el estudio de Key Data para Público, los sondeos mantienen a la candidata del PP en cabeza, con mucha ventaja sobre el resto de formaciones y con muchas posibilidades de situarse por encima de los 60 escaños, una cifra que prácticamente le garantiza la posibilidad de conformar un Gobierno con Vox después de los comicios.

El estudio fue realizado en base a encuestas publicadas antes de dos eventos que podrían causar un impacto notable tanto en la campaña como en las tendencias demoscópicas: el debate electoral del pasado miércoles, y lo vivido el pasado viernes durante un debate en la Cadena Ser, cuando Unidas Podemos, el PSOE y Más Madrid, abandonaron el foro después de que la candidata de Vox, Rocío Monasterio, se negara a condenar de forma expresa las amenazas de muerte realizadas contra Pablo Iglesias y su familia a través de una carta que contenía cuatro balas de un fusil de asalto Cetme.

Según el estudio de Key Data, Isabel Díaz Ayuso tiene una estimación de voto del 41,5%, un porcentaje que le valdría 60 escaños. "El liderazgo de Isabel Díaz Ayuso se consolida al inicio de la campaña. Alcanza el 41.5% de los votos y los 60 escaños. Sin embargo, está aún lejos de la mayoría absoluta. Necesitará el apoyo de Vox, dentro o fuera del gobierno, pero con una influencia que será menor a medida que aumente la distancia en escaños entre las dos formaciones", explica Paz Álvarez, directora técnica de Key Data.

En el bloque de la derecha, pese a que Ayuso se mantiene fuerte y no ha sufrido demasiado desgaste en esta primera mitad de campaña electoral, Vox sigue situándose por encima de los 10 escaños, lo que da muchas posibilidades de gobierno al bloque conservador, que tendría a su alcance lograr una mayoría absoluta.

En concreto, la formación de ultraderecha tiene una estimación de voto del 9%, lo que se traduciría en 12 escaños. "De momento, y a pesar del empuje de la presidenta de la comunidad, Vox mantiene sus decisivos 12 escaños en la Asamblea de Madrid, pero no veremos al partido de Abascal superando las previsiones con un gran crecimiento como ocurrió hace dos meses en Catalunya. Muchos votantes de Vox se decantan en esta ocasión por Ayuso, aunque habrá que ver en los próximos días si el discurso, al más puro estilo Marine Le Pen, con el que ha iniciado la campaña para la fuga de votos al PP, tiene efecto", apunta Álvarez.

El damnificado de este reparto de votos en el bloque conservador sigue siendo Ciudadanos, que no logra remontar las encuestas de principio de campaña que apuntan hacia la desaparición de los de Edmundo Bal en la Asamblea de Madrid. Precisamente de la pérdida de votos de Cs deviene gran parte del crecimiento de Ayuso, que en las transferencias de voto se queda con la mayoría de los votos fugados (hasta 292.000, según el estudio).

"Las perspectivas para Ciudadanos, hasta hace unas semanas socio de gobierno del PP, no son nada halagüeñas. No alcanza el 5% necesario para entrar en el cómputo de escaños para la Asamblea de Madrid. Edmundo Bal, a pesar de sus esfuerzos por recuperar el centro, se aleja cada vez más de ese porcentaje que ya empieza a verse como inalcanzable para los naranjas", afirma la directora técnica de Key Data.

En el bloque de la izquierda sí que han tenido lugar algunos cambios en las tendencias demoscópicas: el PSOE de Ángel Gabilondo pierde fuelle mientras el Más Madrid de Mónica García se refuerza y el Unidas Podemos de Pablo Iglesias se estanca tras el tirón inicial provocado por el anuncio de su candidatura y su salida del Gobierno.

El estudio da a los socialistas una estimación de voto del 23,2%, lo que se traduce en 34 escaños, de manera que Gabilondo, que arrancó la campaña con posibilidades de crecer y acercarse a los 40 escaños, está ahora más cerca del umbral de los 30 diputados. En este sentido, la estrategia puesta en marcha por el PSOE al inicio de la campaña para tratar de "pescar" en la fuga de votos de Ciudadanos no ha dado resultado; los socialistas apenas captarían 14.000 de los más de 500.000 votos que perdería Cs en las elecciones del 4 de mayo.

"La campaña de Gabilondo está funcionando peor que la de hace dos años. A pesar de la participación del presidente del Gobierno y su equipo en la campaña madrileña, pierde tres escaños y más de un cuatro por ciento de los votos válidos", apunta Álvarez.

El partido que sale reforzado de esta primera parte de la campaña en el bloque de la izquierda es Más Madrid. La candidatura liderada por Mónica García aspira a obtener los mismos resultados que obtuvo el tándem Errejón-Carmena en 2019 e, incluso, podría superarlo. El estudio les da una estimación de voto del 13,8%, lo que se traduciría en 20 escaños. "Mónica García consigue frenar la amenaza de la absorción del partido de Iglesias y, de seguir así, podrá repetir o incluso superar sus 20 escaños actuales, a pesar de no contar con la presencia de Carmena ni de Errejón en cabeza de la candidatura", explica la directora técnica de Key Data.

Con el anuncio d su candidatura, Pablo Iglesias logró alejar a Unidas Podemos del temido umbral del 5% (necesario para entrar en el Parlamento autonómico madrileño) y dio a la formación un tirón que se reflejó en las encuestas, sin embargo, llegado el ecuador de campaña el estudio de Key Data apunta hacia un cierto estancamiento de su candidatura.

El estudio sitúa la participación por encima del 70%

En concreto, la estimación de voto para los de Pablo Iglesias es del 7,2% y de 10 escaños. "el exvicepresidente del Gobierno consigue relanzar Unidas Podemos. Tras el empuje inicial que alejó al partido morado del temido 5%, se estanca y es superado, con creces, por Más Madrid", apunta Álvarez.

Aunque el escenario a mitad de campaña sigue siendo favorable para la derecha, las posibilidades siguen abiertas y el panorama es mucho más ajustado de lo que parece, ya que cualquier pérdida o ganancia de voto entre los bloques puede acabar determinando el resultado. Una de las claves de estas elecciones reside en la movilización, ya que una participación más alta parece favorecer a una izquierda cuyo electorado es más reticente a ir a votar.

"Los madrileños siguen pensando en acudir a las urnas de forma masiva el 4 de mayo, si bien se observa un ligerísimo enfriamiento en la participación, cosa lógica en este momento, una vez asumida la presencia de Iglesias, las sorpresas en la confección de las candidaturas, las fugas de Cs al PP…. y cuando apenas ha comenzado la campaña. A pesar celebrarse en día laborable, la participación será muy alta, rozará el 70%", pronostica Álvarez.​