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El Congreso peruano rechaza inhabilitar a un parlamentario denunciado por violación

El legislador Freddy Díaz Mónago, que fue expulsado del partido Alianza para el Progreso, está acusado de violar a una extrabajadora del Parlamento en su despacho.

El congresista peruano Freddy Díaz Monago.
El congresista peruano Freddy Díaz Mónago. FB

El pleno del Congreso de Perú ha rechazado este martes el informe final que buscaba inhabilitar de la función pública por diez años al legislador Freddy Díaz Mónago, acusado de violar sexualmente a una extrabajadora del Parlamento en su despacho.

La votación se ha saldado con 60 congresistas a favor de su inhabilitación, dos en contra y 21 abstenciones. Insuficiente dado que se requieren 66 votos para aprobar el informe rubricado por la Subcomisión de Acusaciones del Parlamento en el que se acusaba a Díaz de haber hecho un "mal uso del poder" para "sostener relaciones sexuales e ingerir licor con una trabajadora que está bajo su cargo".

La sesión parlamentaria en la que se solicitaban diez años de inhabilitación de la función pública para el parlamentario se desarrolló de forma privada por petición expresa de Díaz. 

La propuesta de la subcomisión, que preside la conservadora Lady Camones, obtuvo el respaldo de la mayoría de los congresistas de grupos de derecha, entre ellos Fuerza Popular, Avanza País y Alianza por el Progreso, que votaron casi en bloque a favor.

Por su parte, los grupos de izquierda votaron más divididos a favor o en abstención y solo dos legisladores no agrupados se opusieron al informe, que finalmente se quedó a seis votos de ser aprobado y pasó al archivo.

El caso de Díaz se conoció a finales de julio, cuando una trabajadora del Legislativo lo denunció por violación sexual en un acto que habría cometido en las oficinas parlamentarias.

El congresista, quien fue expulsado del partido Alianza para el Progreso, negó las acusaciones y siguió acudiendo con normalidad a las sesiones parlamentarias hasta septiembre, cuando el pleno aprobó su suspensión por 120 días.

En aquella ocasión, el propio Díaz, sobre quien pesa una orden judicial de impedimento de salida del país, votó a favor de su suspensión por considerar que cometió "un hecho lamentable" al ingerir alcohol en el Congreso.

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