Cifuentes se vanagloria de que los antidisturbios se hayan ido de rositas tras 3.000 manifestaciones

La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha afirmado este lunes que desde que está en el puesto no tiene constancia de que se haya abierto expediente disciplinario alguno a los policías, y en concreto a antidisturbios, que han trabajado en las más de 3.000 manifestaciones que ha acogido la capital durante el último año.

Ello incluye a los agentes que cargaron contra indignados durante varias manifestaciones, así como la polémica actuación de los antidisturbios en la estación de Atocha el 25-S, que fue criticada hasta por el sindicato mayoritaria de la Policía, el SUP.

En un chat digital en el diario '20 minutos', en el que respondía a preguntas de los lectores, Cifuentes ha explicado que después de cada intervención de las Unidades de Intervención Policial (UIP) (los conocidos como 'antidisturbios') se hace un informe interno para analizar su actuación y ver si se puede mejorar. "Aunque abrirlo o no depende de la Dirección General de la Policía, no me consta ningún expediente disciplinario desde que estoy en el puesto", ha añadido.

Precisamente, uno de los lectores también ha preguntado a Cifuentes por las investigaciones sobre los presuntos excesos policiales que se cometieron en el interior de la estación de Atocha el 25 de septiembre, en la primera convocatoria de 'Rodea el Congreso'. "La Dirección General de la Policía abrió una investigación interna sobre la actuación policial en Atocha de cuyo resultado le podrá informar en el Ministerio del Interior", ha respondido.

En este sentido, la delegada ha respaldado la actuación de la Policía "como garante del Estado de Derecho y responsable de mantener la seguridad ciudadana".

En otro punto, la delegada ha reiterado que está en contra de que se restrinja el derecho de reunión pero sí quiere que "se racionalice la utilización del espacio público para hacer compatible el derecho de manifestación con los derechos del resto de los ciudadanos".

"Existen zonas de Madrid como la zona Centro especialmente castigada por movilizaciones que están llevando a la ruina a los comerciantes que tienen que echar el cierre cada vez que hay una manifestación", ha añadido.

La delegada ha defendido que la autocrítica es "necesaria", al igual que el derecho a la protesta, "siempre que se haga de manera pacífica y conforme a lo que establecen las leyes". "Las medidas tomadas por el Gobierno del PP obedecen a la situación económica en la que nos encontramos", ha esgrimido tras ser preguntada por si decisiones del Gobierno eran contrarias a su programa electoral.

Cifuentes ha afirmado también que "no tiene mayor interés" en entrar en polémicas sobre el número de asistentes a manifestaciones y que, por tanto, "no tiene inconvenientes" en que sea un organismo independiente el que haga el recuento de la participación en las protestas. Ha apuntado que actualmente el cálculo de asistentes a manifestaciones lo realiza la sala del 091 de la Policía Nacional según los datos que obtiene con las vistas aéreas desde el helicóptero.

Sobre la limitación del derecho de huelga, que ha propuesto recientemente el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, Cifuentes ha destacado que es un derecho constitucional que apoya "sin reservas", pero ha añadido que "es una asignatura pendiente" que no esté reguladdo por la Ley, tal y como determina la Constitución.

"Actualmente hay un Real Decreto del año 1977 y una sentencia del Tribunal Constitucional del año 1981 que regulan el derecho de huelga. Sin embargo, comprendo que la Ley de huelga no es una prioridad para el actual Gobierno, puesto que la crisis económica y el paso son mucho más importantes", ha añadido.

Cristina Cifuentes también ha hablado de la corrupción. Ha abogado por que se elimine y aunque cree que no está relacionada con la crisis, "es posible que con ella haya aumentado o se perciba de otra manera". "Creo que tenemos que luchar contra la corrupción con todos los instrumentos a nuestro alcance", ha añadido.

"La inmensa mayoría de las personas que nos dedicamos a la política lo hacemos con vocación de servicio público. El amiguismo, la corrupción o la falta de honestidad son las excepciones", ha asegurado en otra respuesta.