Ecologistas y científicos han alertado este lunes del "crítico" estado de las lagunas de Doñana y han reclamado al PP y a Vox que reconsidere la ley que han registrado en el Parlamento andaluz y que persigue ampliar –a las bravas, aplicando el rodillo de la mayoría absoluta, y sin consenso alguno, desoyendo a la UE– las zonas regables en el entorno del Parque Nacional por la vía de la modificación del llamado plan de la fresa de 2014, que contó en su momento con 34 votos favorables y solo cinco en contra y que los tribunales han avalado una y otra vez.

La reunión del Consejo de Participación de Doñana, en el que están todos los que tienen algún tipo de intereses en la zona, fue convocada expresamente para valorar y conocer la nueva normativa que impulsa Juan Manuel Moreno Bonilla (PP). De ella no habían tenido conocimiento, porque el PP la llevó directamente al Parlamento: "Esta es la segunda vez que, desde la Junta de Andalucía, se ignora la existencia del Consejo de Participación de Doñana y los acuerdos alcanzados en él para regular los regadíos de la Corona Norte", reprochó la organización conservacionista SEO/BirdLife.

El encuentro reveló que, a grandes rasgos, hay tres posiciones al respecto. Por un lado, están los científicos, los ecologistas y el Gobierno de España, que quieren que Moreno reconsidere la ley porque sencillamente no hay agua suficiente y lo que se debe hacer (y de lo que se debe hablar) es preservar Doñana. Por otro, la patronal y varios ayuntamientos de la zona, que están dispuestos a ampliar las hectáreas regables y que reclaman más información y un procedimiento que permita resolver un asunto con estabilidad. Y por último, las organizaciones y patronales agrarias, el Gobierno andaluz y el PP, que seguirá adelante con su normativa. La derecha sostiene que no afectará a los acuíferos de Doñana, porque la idea es que los regantes se alimenten de aguas superficiales, lo que implicaría obras.

"Es una proposición de ley que ha presentado Moreno en contra de Doñana, en contra del acuífero, en contra de la opinión de las autoridades europeas. Él es el máximo responsable del Partido Popular a nivel andaluz, es el presidente del grupo parlamentario del PP y además es presidente de la Junta de Andalucía, por lo tanto es el principal y único responsable de que esta propuesta haya llegado al Parlamento y que en estos momentos se estén dando falsas expectativas a regantes que se saltaron la ley entre 2004 y 2014 y a los cuales ahora se le pretende amnistiar", señaló WWF.

Con la proposición de PP y Vox se quiere "transformar de manera totalmente ridícula unos terrenos, para los que no hay agua, en terrenos de regadío". "Y esto haría que la Junta pudiera no tener que abrirles expedientes por vulneración de la normativa de ordenación del territorio. Con lo cual, al final aquí sabemos todos que todo esto tiene un trasfondo relacionado con las próximas elecciones que van a acontecer", afirmó Juanjo Carmona, letrado de WWF.

El presidente del Consejo de Participación de Doñana, el biólogo Miguel Delibes de Castro, manifestó que la norma era "muy negativa", ya que "no hace más que generar tensión y alimentar el conflicto" ante la "situación dramática que está viviendo Doñana y los regadíos".

"Esta iniciativa supone hacer juegos políticos que se parecen al toreo de salón, cuando una situación dramática como la que vivimos en Doñana y en los regadíos requieren tomarse las cosas en serio, agarrar el toro por los cuernos, tomar decisiones probablemente impopulares, gastar dinero y trabajar, todo lo contrario de hacer proposiciones de ley que no se pueden cumplir y que no van a ningún lado", dijo, según recoge Europa Press.

Para Delibes es "necesario" un pacto entre el Gobierno central, la Junta de Andalucía, los ayuntamientos, los regantes y los conservacionistas para "avanzar en la conservación de Doñana". "Así no se arreglan las cosas. Lo que hay es simplemente pensamientos mágicos: Quieren arreglar o cambiar la realidad con buenos deseos, pero no se cambia así, sino trabajando".

Estado crítico

El director de la Estación Biológica de Doñana-CSIC, Eloy Revilla, señaló que el parque está en "estado crítico" y que "más de la mitad de sus lagunas han desaparecido", según indicó el CSIC en una nota. Revilla recordó que España "está condenada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea por no haber tenido en cuenta la extracción ilegal de agua para el cultivo y las extracciones de agua para abastecimiento urbano en la estimación de las extracciones totales de agua subterránea de la comarca y por no haber previsto ninguna medida para evitar la alteración ocasionada por las extracciones de agua subterránea sobre los tipos de hábitats catalogados como prioritarios".

Los datos generados por la actividad científica de la Estación Biológica de Doñana, explicó Revilla, arrojan "resultados desoladores, tanto en relación con el estado de las lagunas y otros hábitats del espacio natural como con la biodiversidad que depende de ellos: El deterioro del sistema de lagunas de Doñana es generalizado. Se ha constatado que el 59% de las lagunas de mayor tamaño de Doñana no se han inundado al menos desde 2013".

"Estos cambios, están significativamente relacionados con la temperatura y la precipitación de cada año, pero también con la extensión de áreas cultivadas, la superficie construida en Matalascañas, la distancia a las estaciones de bombeo de la urbanización y el funcionamiento del campo de golf", asegura el CSIC.

Sobre la ley que promueve Moreno junto con Vox, Revilla manifestó que la proliferación "descontrolada" de cultivos de regadío "sin las correspondientes autorizaciones" ha sido "causada por un claro fallo de gobernanza por parte de las administraciones competentes". Para el director de la Estación Biológica, hay una "clara falta de voluntad política" a la hora de solucionar el problema. "Esta inacción ejecutiva es la que nos ha llevado al insostenible punto crítico en el que se encuentra Doñana".

Según Revilla, la necesidad de proveer de agua a las explotaciones que aparecen en la proposición "dificulta aún más la solución urgente del problema". "La situación actual de Doñana es crítica y no permite esperar otra década a que se tomen las decisiones que ajusten la demanda de agua a la disponibilidad".

"Si así se hiciera, estaríamos imponiendo, contra la legalidad vigente, la pérdida completa de los sistemas de lagunas temporales y otros hábitats dependientes del acuífero. Adicionalmente, de no actuar con urgencia, el agotamiento del recurso hará que las explotaciones legales tengan problemas para regar, como ya está sucediendo en esta campaña de 2022-2023, poniendo en riesgo toda la actividad económica que depende del acuífero", subrayó.

El problema al que se enfrenta Doñana es "muy complejo" y "también lo tendrá que ser su solución, dijo. "La creación de falsas expectativas, que a priori sabemos no se pueden cumplir, no hace sino añadir complejidad al problema. Se utiliza una dialéctica infantil, de buenos y malos, que solo busca enfrentar a distintas partes de la sociedad, utilizando mensajes absurdos: Es importante recordar que, para ser sostenibles económica, social y ambientalmente, las actividades humanas, también las económicas, necesitan de un medio ambiente predecible y bien conservado", afirmó.