Belarra, Díaz y Verstrynge, las únicas diputadas que han renunciado a las dietas del Congreso

Los diputados reciben otros pagos más allá del sueldo como parlamentarios. Entre ellos, una tarjeta para abonar taxis en Madrid con un límite de 3.000 euros anuales, la cobertura de sus viajes por parte del Congreso o una indemnización para "afrontar los gastos que les origine la actividad de la Cámara". Durante la presente legislatura, esta indemnización, que funciona a modo de dietas para los diputados, asciende a 958,75 euros al mes para los electos por Madrid y a 2.008,61 euros para los escogidos por otras circunscripciones.

De los 350 diputados que componen la Cámara Baja, solamente tres han renunciado a cobrar esta indemnización: la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 en funciones, Ione Belarra, la vicepresidenta y ministra de Trabajo en funciones, Yolanda Díaz, y la secretaria de Estado para la Agenda 2030 en funciones, Lilith Verstrynge.

El Congreso aseguraba que solo dos diputados habían rechazado la indemnización y que eran de Sumar

Público pidió estos datos al Congreso de los Diputados a través de una solicitud de acceso a la información. En su respuesta, la Cámara Baja aseguraba este 18 de octubre que solo dos diputados habían rechazado esta indemnización y que ambos formaban parte del grupo parlamentario de Sumar. Tras consultar con el grupo, Público ha podido corroborar que esas dos personas eran Ione Belarra y Lilith Verstrynge. Pero en esas conversaciones con Sumar, este medio ha sabido que Yolanda Díaz también ha renunciado a las dietas.

Yolanda Díaz ha comunicado este lunes al Congreso su renuncia a las dietas; tras un "defecto de forma" la primera vez que lo intentó

El equipo de la vicepresidenta asegura que Díaz intentó hacer constar su renuncia a la indemnización al recoger su acta de diputada, como Belarra y Verstrynge, pero que hubo un defecto de forma. Díaz ha presentado este mismo 23 de octubre un nuevo documento ante el Congreso renunciando a estas dietas, según la documentación a la que ha accedido Público. Por ello, el caso de la vicepresidenta no se contabilizaba en la respuesta del Congreso a la consulta realizada por este medio utilizando la ley de transparencia.

Las dietas son compatibles con cualquier otro sueldo

Los parlamentarios no pueden cobrar más de un sueldo público. Por ello, los que tienen responsabilidades en otras administraciones tienen que renunciar a una de las dos retribuciones: la del Congreso o la del otro organismo. Es el caso de diputadas como Belarra, Díaz y Verstrynge que cobran como miembros del Gobierno y, por tanto, han tenido que renunciar al salario del Congreso.

Pero la ley electoral, que es la que dictamina esta prohibición, les permite cobrar las dietas o indemnizaciones de la administración de la que no reciban el sueldo. Por ello, podrían haber mantenido la indemnización del Congreso. Así lo han hecho los miembros del Gobierno que son del PSOE. El resto de diputados de la Cámara Baja tampoco han renunciado a estas dietas.

23 diputados no cobran sueldo del Congreso

De los 350 diputados con escaño actualmente en el Congreso hay 23 que no reciben el sueldo como parlamentarios —lo que se conoce como asignación constitucional—, según la respuesta de la Cámara Baja a la solicitud realizada por Público al amparo de la ley de transparencia.

De esos 23 diputados que no reciben la asignación del Congreso, 17 son del PSOE, el principal partido del Gobierno. Entre ellos estarían el propio presidente en funciones, Pedro Sánchez, o los ministros en funciones que también son diputados, como Teresa Ribera, Margarita Robles o José Manuel Albares. Estos parlamentarios del PSOE estarían cobrando su sueldo como miembros del Gobierno en lugar de como diputados.

En el caso de los socialistas todos los que han renunciado al salario del Congreso siguen ingresando la indemnización. Lo mismo pasa con la derecha. Dos diputados del PP y uno de Vox han renunciado a la asignación constitucional —posiblemente por tener un sueldo en Gobiernos autonómicos o Ayuntamientos— pero han mantenido el cobro de las dietas.

Belarra, Díaz y Verstrynge

En el caso de Sumar, la respuesta del Congreso a la petición de Público asegura que hay tres diputados que han renunciado a cobrar el salario por parte del Congreso y dos que han rechazado recibir las dietas. Aún así, la Cámara Baja no ha querido aclarar quiénes son esos diputados para, según alegan, proteger sus datos personales.

El Congreso no aclara qué diputados cobran las dietas para proteger su intimidad y datos personales

El Congreso argumenta que "debe prevalecer la garantía de la intimidad" de los diputados sobre el interés público y que "conocer las cuantías abonadas a cada uno de los diputados no es un dato necesario a efectos del control del gasto público de la Cámara".

Debido a esa ocultación por parte del Congreso, Público contactó con distintas fuentes del grupo parlamentario de Sumar. Desde la coalición aseguraban que había tres diputadas que habían renunciado tanto al sueldo como a las dietas: Ione Belarra, Yolanda Díaz y Lilith Verstrynge.

El "defecto de forma" de Yolanda Díaz

Este medio ha podido comprobar, tras consultar los documentos de renuncia que Belarra y Verstrynge hicieron llegar al Congreso, que serían ellas las dos diputadas que no estaban recibiendo la indemnización. Las diputadas de Podemos en su comunicación a la Cámara Baja indicaban lo siguiente: "Renuncio a las percepciones que me corresponden como diputada, incluida la indemnización".

Yolanda Díaz, en cambio, estaría contabilizada como que había renunciado al sueldo pero no a las dietas. El equipo de la vicepresidenta y líder de Sumar aseguró a Público que esta también había renunciado a las dietas. Tras diversas consultas, el equipo ha explicado a Público que si ella no consta como que ha rechazado este pago, es por un "defecto de forma".

La renuncia de Díaz, a diferencia de la de Belarra y Verstrynge, no explicitaba que renunciaba también a la indemnización

Díaz había hecho llegar una comunicación al Congreso donde renunciaba "a las percepciones que le corresponden en su condición de diputada por estar recibiendo los propios de vicepresidenta". Pero la renuncia de Díaz, a diferencia de la de Belarra y Verstrynge, no hacía constar de forma explícita que rehusaba también recibir la indemnización a la que tienen derecho aunque cobren del Gobierno.

El equipo de la vicepresidenta asegura a Público que ya han arreglado el problema con el Congreso. Este 23 de octubre la vicepresidenta ha presentado un nuevo documento en la Cámara Baja en el que hace constar "su renuncia a la indemnización por gastos que le origine la actividad de la Cámara como diputada electa", según ha podido comprobar este medio.

Aún así, desde Sumar insisten en que Díaz no ha recibido la indemnización del Congreso durante estos primeros meses de legislatura en los que su renuncia no se había hecho efectiva. De hecho, aseguran que desde que fue nombrada ministra nunca la ha cobrado.

El resto de diputados de Sumar, igual que todos los parlamentarios de los demás grupos, cobran la indemnización. Belarra y Díaz han renunciado a 958,75 euros al mes como diputadas por Madrid y Verstrynge, a 2.008,61, ya que se presentó como 'paracaidista' por Barcelona. La indemnización para los diputados de circunscripciones distintas a Madrid es más alta porque se concibe también como una ayuda para la residencia en la ciudad, ya que se entiende que viven fuera de la capital, aunque no siempre sea así.

Este dinero extra sirve, según el propio Congreso, para que los parlamentarios afronten "los gastos que les origine la actividad de la Cámara". Funciona, por tanto, como el cobro de dietas o gastos de representación y no hay que pagar impuestos por ello, ya que es un concepto exento de tributación. La Mesa del Congreso, formada por nueve diputados, decide en cada legislatura cuál es la cuantía de la indemnización.