Desde 9.00 hasta las 20.00 horas de este viernes los 8.700 militantes de ERC decidirán si aprueban el preacuerdo con el PSC para votar a favor de la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat o lo rechazan. La consulta llega en un momento de fuerte crisis interna en la formación, que ha encadenado un pésimo último ciclo electoral.

Las asambleas territoriales que se están haciendo esta semana para explicar el pacto logrado —con la financiación como elemento más destacado— muestran como el resultado de la votación es incierto, sobre todo por las dudas que se cumpla aquello acordado.

Ahora bien, en algunos sectores el apoyo al "sí" es rotundo y masivo, cuando menos de manera pública. Entre los principales dirigentes de Esquerra y buena parte de sus cargos institucionales más destacados cuesta encontrar a personas que hayan expuesto que votarán "no" en la consulta.

La dirigente más destacada que defiende el acuerdo con el PSC es la secretaria general de la formación, Marta Rovira, que ha sido precisamente la que ha liderado las negociaciones con los socialistas. En un artículo en Nació Digital, manifiesta que "no podemos dejar que nos condicione la duda de la implementación de los acuerdos" y ha calificado el pacto de "salto adelante importantísimo" en los objetivos del partido. Por todo ello, ha hecho un llamamiento a "estar a la altura para determinar el curso del país" en el "momento histórico" en el cual se encuentran.

Este mismo jueves, quien se ha posicionado en el mismo sentido es el presidente del Govern en funciones, Pere Aragonès, que en un mensaje en X ha asegurado que votará de manera "rotundamente y clara" a favor del pacto con el PSC. También ha defendido que el acuerdo "puede representar el progreso en el autogobierno más grande hasta el momento".

Ambiguo Junqueras

Más ambiguo ha sido Oriol Junqueras, presidente de ERC hasta el 10 de junio, que ha mostrado "respeto" por el contenido del texto, pero a la vez ha dicho que "entiende las dudas" de las bases sobre el cumplimiento del acuerdo.

Con todo, dirigentes muy próximos a Junqueras sí que se han posicionado a favor del "sí" de manera explícita. Lo han hecho, por ejemplo, el portavoz del partido en el Congreso, Gabriel Rufián; el vicesecretario de coordinación interna, Oriol López; o el presidente del Port de Barcelona, Lluís Salvadó.

También lo han hecho el exconseller de Territorio y antiguo alcalde de Sabadell, Juli Fernández —próximo a Junqueras y miembro del equipo negociador con el PSC— o el diputado en el Parlament Jordi Albert, que comparte comarca —el Baix Llobregat— con el hasta hace poco líder del partido.

60.000 millones

En cuanto a los dirigentes próximos a Rovira, hay un puñado que han defendido el acuerdo compartiendo su artículo en Nació Digital en las redes, como por ejemplo la secretaria general adjunta y diputada en el Parlament, Marta Vilalta, o la también diputada Najat Driouech.

Los consellers en funciones Tània Verge (Igualdad y Feminismos) o Carles Campuzano (Derechos Sociales) también han compartido argumentario a favor del "sí" a la investidura de Illa, mientras que la titular de Economía, Natàlia Mas Guix, directamente lo ha defendido asegurando que la nueva financiación podría aportar unos 60.000 millones anuales en ingresos en la Generalitat.

El diputado en el Congreso Jordi Salvador es otro de los que se decanta por el sí "por infinidad de razones" y, de hecho, cuesta encontrar altos cargos que hayan expresado que se oponen. Uno de los casos es el de Pau Ricomà, alcalde de Tarragona durante el pasado mandato (2019-2023). A la vez, varios de los alcaldes actuales de la formación, como es el caso de Marc Aloy (Manresa), Aurora Carbonell (Sitges) o Adam Tomàs (Amposta) y 22 más sí que se decantan por el "sí" a la consulta, según han expuesto en otro artículo en Nació Digital.

Entre los grupos organizados, el minoritario Col·lectiu Primer d'Octubre ha hecho un llamamiento a votar "no" con argumentos como que el Estado español "no cumple nunca" sus compromisos o que si Illa es investido presidirá "sí o sí durante cuatro años la Generalitat", sin que ERC tenga capacidad para destituirlo. El veredicto final se conocerá este viernes al atardecer y la palabra la tendrán los militantes republicanos.