Las acusaciones por la inacción de Rueda ante la marea de microplásticos toman la campaña de las elecciones gallegas
Voluntarios y familias vuelven a llenar las playas para limpiarlas de 'pellets' ante la pasividad de la Xunta del PP, mientras el Gobierno le pide que "ejerza su competencia" y eleve el nivel de emergencia para poder brindarle ayuda.
A Coruña--Actualizado a
Las playas de la costa gallega se volvieron a llenar este domingo de voluntarios que acudieron espontáneamente a las zonas contaminadas por la marea de microplásticos vertidos por el buque Tocano a mediados del mes pasado, para limpiar los arenales con sus propias manos o armados con utensilios domésticos.
Entre acusaciones de inacción y desidia hacia la Xunta de Alfonso Rueda cuando quedan seis semanas para las elecciones autonómicas, la oposición al PP empieza a comparar el episodio con la catástrofe provocada hace 22 años por el petrolero Prestige, tanto por las consecuencias medioambientales del vertido como por sus derivadas políticas por la errática gestión que del siniestro hicieron de las autoridades.
El pasado día 8, el mercante Tocano, abanderado en Liberia, perdió varios contenedores mientras navegaba frente a la costa norte de Portugal. Al menos uno de ellos estaba cargado de bolsas con miles de millones de pellets o microplásticos de la empresa polaca Bedeko Europe, dedicada a la fabricación de ese tipo de materiales.
Constancia el mismo día
Las bolitas blancas, del tamaño de un grano de arroz, empezaron a llegar cinco días después a la ría de Muros e Noia. La Xunta tuvo constancia del incidente ese mismo día gracias a las llamadas ciudadanas al teléfono de emergencias 112, que gestiona la Administración autonómica.
Pero no fue hasta el pasado viernes, casi un mes después, cuando decidió activar un plan de contingencias para determinar la toxicidad de los pellets y mapear los puntos de la costa a donde estaban llegando.
Para entonces, la marea de plásticos, que el domingo alcanzó al litoral de Cantabria, ya se había extendido hacia el sur hasta a las rías baixas gallegas y hacia el norte hasta las playas de la bahía de A Coruña y de A Mariña, en Lugo.
Sin ayuda del Gobierno autonómico, asociaciones ecologistas y de pescadores y mariscadores ya habían puesto en marcha sus propios planes de limpieza con voluntarios, como ocurrió con el chapapote del Prestige, y anunciado una querella por un delito medioambiental contra la empresa armadora del barco.
La portavoz nacional del Bloque Nacionalista Galego (BNG) y candidata a la presidencia de la Xunta, Ana Pontón, ha acusado al presidente en funciones de la Xunta, Alfonso Rueda, de "ocultar información" sobre el vertido y de no actuar contra lo que calificó de "tragedia medioambiental".
A pie de playa en Muros, a donde acudió a comprobar los efectos del vertido, Pontón anunció el sábado que reclamaría este lunes la convocatoria urgente de la Deputación Permanente del Parlamento de Galicia para exigir explicaciones a Rueda.
El candidato del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, también ha acusado a la Xunta de actuar "tarde, mal y a rastras", y ha advertido de las consecuencias de retardar la respuesta al vertido. "Parece que no recuerdan el pasado, Rueda está tirando del manual del Prestige", dijo Besteiro.
"Partido de los plásticos"
La candidata de Sumar Galicia, Marta Lois, aseguró por su parte que las siglas PP le recuerdan al "partido de los plásticos", mientras la de Podemos, Isabel Faraldo, reclamó la dimisión del conselleiro de Mar en funciones, Alfonso Villares.
De momento, Alfonso Rueda no se ha referido al vertido, aunque sí lo hizo Villares, para culpar al Gobierno central de no haber advertido a la Xunta de la gravedad del accidente hasta el pasado 3 de enero.
La Delegacion del Gobierno en Galicia ha desmentido esa versión, y la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, aseguró el domingo que había telefoneado a Rueda para ofrecerle "la colaboración y ayuda que considere necesaria".
El Gobierno ha trasladado en un comunicado que está a la espera de que la Xunta "ejerza su competencia" y declare el nivel 2 de emergencia -mantiene el 1, el mínimo, por el momento- con el fin de poder brindarle "apoyo efectivo" en la recogida y limpieza de los pellets, informa Europa Press.
Ocultación en la televisión pública
Además de las críticas por la inacción de la Xunta, el colectivo Defende a Galega, formado por trabajadores de la Corporación Radio e Televisión de Galicia (CRTVG) que llevan cinco años movilizándose contra el uso partidista de los medios públicos de comunicación en favor del PP, ha alertado de que el tratamiento informativo del vertido pretende ocultar tanto su impacto como la discutida respuesta de la Xunta.
"El Telexornal Serán [el telediario de la tarde] relega la cobertura del problema ambiental que están provocando los pellets de plástico en el litoral gallego al minuto 31 de un informativo que dura 35 ‼️ para ni siquiera darle voz al sector pesquero, el Gobierno o las entidades ecologistas", posteó Defende a Galega en su cuenta de X
Las acusaciones hacia Rueda se han incrementado el mismo día en que se publicaba el primer gran sondeo electoral sobre las autonómicas gallegas, que augura un incremento de los apoyos de la izquierda y un descenso del PP que pone en riesgo su mayoría absoluta.
Según la encuesta de Sondaxe para La Voz de Galicia, el PP perdería tres escaños y se quedaría con 39, un escaño por encima de la mayoría absoluta de 38; el BNG y el PSdeG subirían uno cada uno, hasta 20 y 15, respectivamente, y Sumar Galicia lograría entrar en el Parlamento gallego con otro escaño. Podemos y Democracia Ourensana se quedarían fuera.
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