La Presidencia de Turquía ha anunciado que Rusia y Ucrania firmarán un acuerdo este viernes en Estambul para desbloquear la exportación de cereales varados en los puertos ucranianos. 

El anuncio ha llegado a través de un comunicado en el que afirman que "la ceremonia de firma del acuerdo de envío de granos, en la que estarán presentes el presidente (turco), Recep Tayyip Erdogan, y el secretario general de Naciones Unidas, António Gutérres, tendrá lugar el viernes a las 16.30 horas en la Oficina de Dolmabahçe, con la participación de Ucrania y Rusia", señala la escueta nota.

Poco antes, la ONU había informado que su Secretario General, António Gueterres, "viaja a Estambul como parte de sus esfuerzos para asegurar un pleno acceso global a los alimentos ucranianos y a los alimentos y fertilizantes rusos", comunicaba desde Nueva York el portavoz de la ONU Farhan Haq.

Guterres había interrumpido sus vacaciones para viajar a Estambul, donde ya había acudido la semana pasada para participar en las negociaciones sobre los granos bloqueados por la guerra en Ucrania.

Tras aquella "reunión a cuatro", con representantes militares de Rusia, Ucrania y Turquía, Guterres se mostraba cuidadosamente optimista y hablaba de "un paso adelante clave" y "un rayo de luz". A su vez, el ministro turco de Defensa, Hulisi Akar, pronosticaba un "probable" nuevo encuentro esta semana, aunque no daba pistas de que el acuerdo definitivo era tan cercano.

En ese momento señalaba que "el establecimiento de un centro de operaciones en Estambul, los controles conjuntos en los puertos de salida y destino, y la garantía de la seguridad de la navegación en las rutas de transferencia son las principales cuestiones técnicas" que se abordaban en los contactos diplomáticos en curso.

Según Haq, junto a Guterres también viajan a Estambul el vicesecretario general para Asuntos Humanitarios, Martin Griffith, y la secretaria general de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad), Rebeca Grynspan.

La estimación es que hay actualmente más de 20 millones de toneladas de cereales y semillas de girasol en Ucrania que no pueden salir al mercado como consecuencia del bloqueo del mar Negro tras la invasión rusa. Su ausencia en los mercados internacionales amenazaba con una crisis alimentaria y una hambruna