La televisión pública italiana cancela un monólogo de un escritor sobre la liberación de Italia del fascismo

La decisión de la televisión pública italiana RAI de cancelar el monólogo del escritor Antonio Scurati (Napoles, 1969) sobre la fiesta del 25 de abril, día de celebración de la liberación de Italia del nazi-fascismo, ha causado una gran polémica en el país.

Scurati, conocido por sus libros sobre el dictador fascista Benito Mussolini, entre los que destaca M. Il Figlio del Secolo (M. El hijo del Siglo), iba a participar este sábado en el programa Che Sarà de la cadena RAI 3, donde el escritor napolitano tenía que leer un monólogo dedicado a la fiesta de la Liberación.

La presentadora del show televisivo, Serena Bortone, anunció esta mañana en sus redes que el discurso de Scurati había sido cancelado. En su publicación en Instagram, Bortone explicó que se enteró "con consternación, y por pura casualidad, de que el contrato de Scurati había sido rescindido" sin "explicaciones plausibles".

El contenido del monólogo

Tras conocerse la noticia de la ausencia de Scurati del programa, el periódico La Repubblica ha filtrado durante esta mañana el texto del discurso que el escritor había tenido que ensayar.

El párrafo inicial comenzaba con el recuerdo del secuestro y de la muerte del ex secretario del Partido Socialista Unitario (PSU), Giacomo Matteotti, quien fue asesinado por los fascistas en 1924. Además, Scurati recordó algunos lugares símbolo donde centenares de civiles fueron asesinados por los nazis-fascistas.

El escritor napolitano aludía también  en el texto a la política italiana actual, acusando al Gobierno liderado por Giorgia Meloni de "intentar rescribir la historia"  y de "no haber condenado nunca la experiencia fascista", concluyendo que "hasta que la palabra antifascismo no sea pronunciada por quien gobierna, el fantasma del fascismo seguirá infestando la casa de la democracia italiana".

La reacción de las oposiciones

La decisión de cancelar la participación de Scurati fue tachada de "censura" por parte de los partidos de la oposición, que volvieron a condenar lo que consideran la intención del Gobierno ultraderechista de Meloni de controlar la televisión pública y sus contenidos.

El responsable de Cultura e Información del Partido Demócrata (PD), Sandro Ruotolo, criticó al servicio público tachándolo de "TeleMeloni". El político progresista, además, ha afirmado que "eliminar a Scurati cinco días antes del Día de la Liberación es una decisión que no se puede aceptar" y ha pedido explicaciones a la RAI, "por el motivo de esta censura intolerable".

El Movimiento 5 Estrellas, liderado por el ex primer ministro, Giuseppe Conte, a través de los dos senadores Dolores Bevilacqua y Luca Pirondini ha anunciado esta mañana que en los próximos días llevará el caso a la comisión de control de la RAI, tachando la decisión de la televisión pública de "absurda"  y que "sabe a censura".

El secretario de Acción, Carlo Calenda, admitió que "eliminar la intervención de un gran escritor por razones políticas es inaceptable e  indigno", lamentando que "esto sucede en Rusia y no puede suceder en un país europeo". El político liberal pide "una disculpa y la restauración inmediata del monólogo cancelado".

También el secretario de Izquierda Italiana y diputado, Nicola Fratoianni, ha definido el episodio de "gravísimo, vergonzoso y altamente peligroso"; además ha pedido que "Meloni y a sus socios" den explicaciones a la ciudadanía y ha anunciado que su formación política hará una pregunta parlamentaria al respecto.

La RAI: "La participación de Scurati nunca ha sido cuestionada"

Sin embargo, el director de contenido de la Rai, Paolo Corsini, explicó en una nota que la cancelación del acuerdo se trataba de un aspecto "económico y contractual, sobre los que se están realizando investigaciones debido a cifras superiores a las esperadas y otros aspectos promocionales".

"Más allá de estas meras cuestiones burocráticas - precisó Corsini - la posibilidad de que Scurati participe en el programa nunca ha sido cuestionada. Sin censura."

Para el sindicato de periodistas de la RAI, Usigrai, se trata de una medida para "silenciar a los intelectuales que no son bienvenidos por quienes gobiernan".