Los talibán reclaman el atentado de Pakistán

El portavoz de los talibán paquistaníes, Azam Tariq, ha reclamado el atentado terrorista del sábado en la región de Bajaur (noroeste), en el que han fallecido al menos 43 personas y otras 90 han resultado heridas, varias de las cuales se encuentran en estado crítico.

El terrorista suicida detonó su carga explosiva cuando cientos de personas de la tribu Salarzai esperaban la entrega de ayuda humanitaria en un centro de distribución gestionado por el Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas en la ciudad de Jar. Dicho emplazamiento trata de prestar servicio a los refugiados que han abandonado sus hogares por los combates entre fuerzas de seguridad y milicianos ligados con la red Al Qaeda.

Tariq ha afirmado en declaraciones a la CNN que el atentado tenía como objetivo personas que han conformado lo que ha denominado un grupo "progubernamental y antitalibán", en referencia a la tribu Salarzai. Los Salarzais son una de las principales tribus regionales contrarias a los talibán y han apoyado las operaciones del Ejército paquistaní contra los insurgentes. Las zonas tribales de etnia pastún en la frontera con Afganistán tienen infiltrados milicianos talibán e insurgentes contra los que el Ejército paquistaní ha lanzado operaciones militares para eliminarlos.

Esta tribu antitalibán ha tenido un rol fundamental con las milicias tribales, los 'lashkars', para respaldar las operaciones del Gobierno paquistaní contra talibán e insurgentes. Su apoyo al Ejecutivo ha provocado que sean objetivo de los ataques de los milicianos talibán y los insurgentes.

Preguntado sobre si el terrorista suicida pudo ser una mujer, Tariq ha afirmado que cuentan con "cientos de terroristas suicidas hombres esperando su turno". "¿Por qué vamos a utilizar a una mujer, lo que va en contra de las tradiciones del Islam?", ha cuestionado.

El ataque terrorista se ha registrado un día después de los combates de las fuerzas de seguridad paquistaníes contra talibán e insurgentes en la región vecina de Mohmand, en los que perdieron la vida once militares y 24 milicianos.

Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha condenado este domingo el atentado suicida y ha señalado que su país apoya los esfuerzos de las autoridades paquistaníes para consolidar la paz, la seguridad y la justicia.

"Asesinar a civiles inocentes a las afueras de un punto de distribución de comida del programa de Alimentación Mundial es una afrenta al pueblo de Pakistán y toda la humanidad", ha señalado Obama en un comunicado emitido por la Casa Blanca.

"Estados Unidos se encuentra con el pueblo de Pakistán en este difícil momento. Apoyamos fuertemente los esfuerzos de Pakistán por asegurar una mayor paz, seguridad y justicia para sus gentes", ha agregado el mandatario estadounidense, que se encuentra pasando las vacaciones navideñas junto a su familia en Hawai, según recoge el diario mexicano El Universal .