El rey de Arabia Saudí perpetúa su dinastía

RIAD.- El rey saudí, Salman bin Abdelaziz, quien llegó al poder en enero, ha relevado como príncipe heredero a Moqren bin Abdelaziz, de 70 años, y nombró en su lugar a su sobrino Mohamed bin Nayef, de 55 años, que era el segundo en la línea de sucesión. En un decreto real, difundido por la agencia oficial Spa, el monarca de Arabia Saudí también nombró a su hijo, el príncipe Mohamed bin Salman, de 35, como segundo príncipe heredero.

El rey saudí emitió otro decreto importante para sustituir al veterano ministro de Asuntos Exteriores, el príncipe Saud al Faisal, que llevaba cuatro décadas en el cargo, por el embajador actual en Washington, Adel al Yobeir.

Para el reemplazo de Al Faisal, de 75 años, se han alegado motivos de salud, mientras que en el caso de Moqren podría haber sido a petición propia. Moqren fue designado heredero del príncipe heredero en marzo de 2014 -la primera vez en la historia de la Casa Real Saudí que existía esta figura-, y tras la subida al trono de Salman pasó a ocupar de forma automática el primer puesto en la línea sucesoria.

Nada más llegar al trono, el 23 de enero pasado por la muerte de su medio hermano Abdalá, el rey Salman, de 79 años, designó a su sobrino Mohamed bin Nayef segundo en la línea sucesoria. Además, como ministro de Defensa puso a su hijo Mohamed bin Salman, ahora designado segundo heredero al trono, que se convierte en el primer nieto del fundador del reino saudí, Abdelaziz al Saud, que entra en la sucesión.

Nacido en Yeda en 1959, el nuevo príncipe heredero y ministro del Interior, Bin Nayef, que ocupa ahora también el puesto de vicepresidente del Consejo de Ministros, estudió Ciencias Políticas en EEUU y se especializó en asuntos militares y de lucha contra el terrorismo. En agosto de 2009, Bin Nayef, entonces viceministro para Asuntos de Seguridad del Ministerio del Interior, salió ileso de un intento de asesinato en una operación terrorista de Al Qaeda en Arabia Saudí.

En cuanto al nuevo jefe de la diplomacia, Al Yobeir, nacido en 1962, estudió un máster en Ciencias Políticas en la Universidad de Georgetown y fue nombrado embajador en Washington en diciembre de 2006.

Además del cambio en Exteriores, el monarca efectuó una remodelación ministerial que afectó a las carteras de Trabajo y Sanidad. El rey saudí nombró al ministro de Trabajo, Adel al Fakieh, titular de Economía y Planificación, y a Mufrej al Haqbani le encargó la cartera de Trabajo. Por otro lado, el presidente de la compañía petrolera nacional Aramco, Jaled al Faleh, fue designado ministro de Sanidad.

Salman bin Abdelaziz prometió al llegar al trono que seguiría con las mismas políticas que su antecesor, pero ha efectuado muchos cambios en el Gobierno y ha asumido un papel más bélico. Una semana después de su coronación, llevó a cabo una remodelación que afectó a los ministerios de Defensa, Justicia, Asuntos Islámicos, Telecomunicaciones, Asuntos Sociales, Cultura e Información, Agricultura, Asuntos Municipales y Servicios Civiles.

Arabia Saudí, una monarquía ultraconservadora y absolutista, tiene un gran peso internacional como primer exportador de petróleo y como aliado regional de EEUU. En el último mes, ha adquirido además un mayor protagonismo con su intervención militar en el Yemen, al liderar una coalición árabe que bombardea posiciones de los rebeldes hutíes desde el pasado 26 de marzo.