El juicio oral al que es sometida Cristina Fernández de Kirchner llega a su fin. Este lunes ha entrado en una de sus etapas finales, que es la de los alegatos de las defensas. Este tramo ha comenzado con la defensa de Héctor René Jesús Garro, expresidente de la Administración General de Vialidad de la provincia de Santa Cruz. 

El abogado de Garro inició su intervención expresando el "rechazo" al atentado frustrado contra la vicepresidente de Argentina y rogó a Dios que el "odio no gane" y que "cualquier manifestación violenta sea absolutamente una excepción de las reglas de la sociedad y la convivencia social".

En las próximas semanas, llegará el turno del defensor de Fernández de Kirchner, que está acusada por presunta asociación ilícita y administración fraudulenta de recursos públicos. El 22 de agosto el fiscal que interviene en el proceso oral solicitó para ella una pena de 12 años de cárcel y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. 

Lawfare contra Fernández de Kirchner

La dirigente argentina calificó este proceso oral, iniciado en mayo de 2019, como "un juicio al peronismo y a los gobiernos nacionales y populares". De hecho, señaló que los fiscales habían adoptado un "guion" de los medios de comunicación afines a la actual oposición política y defendió que la sentencia "ya estaba escrita" en su contra y volvió a denunciar el lawfare (persecución judicial).

El presidente argentino, Alberto Fernández, con quien la vicepresidenta ha expresado sus diferencias, salió en su defensa, lo que le valió críticas y demandas judiciales por parte de la oposición por la supuesta intromisión en causas judiciales.

Desde la acusación formulada por la Fiscalía, manifestantes peronistas se concentran cada noche en la vivienda de la vicepresidenta para expresarle su apoyo. En una de esas reuniones, la mandataria se acercó a los seguidores cuando un hombre de nacionalidad brasileña intentó dispararle en la cabeza con un arma que, finalmente, falló.