Los efectos de la Covid-19 impactan en la salud, especialmente de la parte de la sociedad más vulnerable y la más expuesta, pero también en la incertidumbre de familias, autónomos y empresas sobre su proyecto de vida futuro.
Iberdrola ha desplegado 100 líneas de acción, dirigidas a mantener la continuidad de sus servicios esenciales para sus más de 100 millones de clientes en el mundo.
La compañía es una de esas empresas que ha decidido poner toda su energía y actuar para responder a las necesidades de ahora -donando material sanitario y de primera necesidad, reforzando la energía que necesitan infraestructuras esenciales y atendiendo a las necesidades de sus clientes- e impulsar la energía de empresas y trabajadores, adelantando pedidos a sus proveedores y reforzando las inversiones para impulsar la economía y el empleo, cuando todo pase.
Entre las iniciativas que se están desarrollando se encuentran éstas:
Donación de material sanitario
Una de esas medidas pasa por aportar eficiencia al aprovisionamiento de materiales de primera necesidad. En colaboración con las administraciones sanitarias, Iberdrola ha realizado una compra de material sanitario valorado en más de más de 25 millones de euros para la adquisición de 450 equipos de respiración, 4,6 millones de mascarillas, 120.000 buzos y 20.000 gafas de protección.
Además, la compañía colabora en otras iniciativas, entre ellas la promovida a través de la plataforma WorldCoo, desde la que empleados y colaboradores realizan donaciones a organizaciones como Save the Children, Unicef, Aldeas Infantiles SOS o Cruz Roja. La recaudación obtenida irá destinada a diez proyectos de investigación con el objetivo de encontrar medicación para evitar nuevas infecciones por Covid-19 y proteger a la población de mayor riesgo.
Plan especial en servicios hospitalarios
Iberdrola se ha puesto también al servicio de los verdaderos héroes de esta situación que vivimos: los sanitarios. A través de un plan de atención especial para los servicios hospitalarios en España, la firma ha revisado la alimentación energética y de reserva de más 350 hospitales y centros sanitarios de toda España, tanto públicos como privados, para asegurar y reforzar su suministro energético.
Ha actuado igualmente con prioridad en la ampliación de potencia para las instalaciones que albergan hospitales y enclaves medicalizados, a los que ha dotado con hasta 50 grupos electrógenos de respaldo.
Ayuda para el pago de las facturas
Como la situación de alarma propiciada por el coronavirus no es solo sanitaria, sino que para muchos colectivos acabará transformándose en una crisis social y económica, Iberdrola ha activado un plan de ayuda para sus clientes con diferentes acciones para aliviar esta coyuntura.
Ya suspendió los cortes de suministro antes de declararse el estado de alarma y ha aplicado esta medida en todos los países donde opera. De hecho, hace semanas que lanzó una propuesta para facilitar el pago de las facturas de luz, gas y otros servicios energéticos a sus más de 10 millones de clientes en España: hogares, autónomos y pymes. De esta forma, la compañía da flexibilidad a los pagos mediante el fraccionamiento de las facturas, hasta en 12 meses y sin coste, a todos los clientes con dificultades de pago que lo soliciten, tanto en mercado libre como en el regulado.
Servicio de urgencia gratuito para los mayores
Consciente de la vulnerabilidad de las personas mayores, la firma energética ha puesto en marcha una actuación adicional destinada a este colectivo, que permite a sus dos millones de clientes mayores de 65 años disponer de un servicio de urgencias eléctricas gratuito durante el estado de alarma y que posibilita solventar cualquier incidencia relacionada con la falta de suministro eléctrico en el hogar. Para ello, Iberdrola cuenta con una amplia red de instaladores en todas las comunidades autónomas, que siguen un estricto protocolo de seguridad y salud para la prestación del servicio.
Protección de la cadena de valor y el empleo
Iberdrola también está empeñada poner toda su energía para actuar e impulsar la actividad de trabajadores y empresas. En los últimos tres meses ha adelantado pedidos a 10.000 entidades de todo el mundo por un valor cercano a los 4.000 millones de euros. Este volumen es el doble que el adjudicado en el mismo periodo del año anterior y contribuirá de forma determinante a mantener la actividad industrial y cientos de miles de puestos de trabajo.
Si el primer trimestre ha sido activo es especialmente en el mes de marzo -coincidiendo con la irrupción de la crisis del coronavirus- cuando se ha pisado el acelerador con adjudicaciones valoradas en 2.900 millones de euros, casi el 75% del total trimestral.
En este contexto, la energía renovable, el despliegue de redes más inteligentes y la innovación en productos y servicios vuelven a ser clave para la reactivación de la economía. Para ello, Iberdrola contempla llevar a cabo unas inversiones sin precedentes, que este año ascenderán a una cifra récord de 10.000 millones de euros.
¿Te ha resultado interesante esta noticia?