La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, percibió 7,37 millones de euros en concepto de remuneración en 2016, un 2% menos que el ejercicio anterior, mientras que el consejero delegado de la entidad, José Antonio Álvarez, vio reducida un 9% su retribución, hasta los 6 millones de euros.

Según el informe de retribuciones del banco, remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el vicepresidente del banco Rodrigo Echenique percibió un sueldo de 3,8 millones de euros el pasado ejercicio, un 4% menos. Por su parte, el vicepresidente Matías Rodríguez Inciarte cobró 4,6 millones de euros en 2016, un 13% menos que el ejercicio anterior.

Los cuatro consjeros ejecutivo de la entidad acumulaban 120,7 millones de euros en su sistema de previsión, de los que 43,1 millones de euros correspondían a Botín y 15,1 millones de euros, a Álvarez, según el informe financiero anual hecho público por la entidad.

La retribución total del consejo de administración se situó en 25,8 millones de euros en 2016, un 4,4% menos que el año anterior, cuando esta cifra ascendió a 27 millones de euros.

Fuentes del banco han explicado que el perfomance de Santander es mejor que la evolución de las remuneraciones, ya que la entidad ha presentado un beneficio atribuido de 6.204 millones de euros, un 4% más que el año anterior. Su ROTE (rentabilidad sobre el capital tangible) ha crecido un 11,1%, mientras que el dividendo por acción aumentó un 5% con cargo a los resultados de 2016 y la acción se revalorizó un 8,8% en el mismo periodo.

El coste de remuneración de los consejeros ejecutivos y de los miembros de la alta dirección también ha seguido descendiendo y ha bajado en 25,3 millones de euros en dos años, lo que supone una caída del 24%. En concreto, este grupo sumaba 104,4 millones en el ejercicio 2014, que pasaron a ser 80,8 millones en 2015 (-23%) y 79,1 millones de euros en 2016.