Iberdrola negocia refinanciar 5.300 millones de deuda para convertirla en un 'macrobono verde'

La eléctrica Iberdrola está sondeando el mercado para modificar y ampliar en 5.300 millones de euros un préstamo existente que se convertirá en el mayor crédito verde emitido por una empresa europea, dijeron banqueros a TRPLC, un servicio de Thomson Reuters especializado en financiación corporativa.

Estos préstamos tienen unas condiciones ligadas al cumplimiento de un indicador sostenible relacionado con la reducción de la intensidad de emisiones por parte de la energética, por lo que se les conocen como bonos verdes.

Iberdrola fue la primera compañía española en emitir un bono verde, en abril de 2014. Desde entonces, se han realizado seis emisiones de este tipo y la energética fue en 2016 el primer colocador del mundo a nivel empresa de este tipo de deuda sostenible.

El que ahora negocia será el segundo préstamo verde de Iberdrola, después de otro de 500 millones de euros acordado con BBVA en febrero del año pasado y que se empleó fundamentalmente en financiar proyectos relacionados con la eficiencia energética y las energías renovables.

BBVA es de nuevo el agente del préstamo de 5.300 millones de euros, que se repartirá en un sindicado de unos 25 bancos.

La apuesta de la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán por este tipo de financiación se está extendiendo a sus filiales. Así, Avangrid, la filial de la compañía Estados Unidos, emitió su primer bono verde el pasado mes de noviembre por importe de 600 millones de dólares.

Actualmente, Iberdrola cuenta con 7.200 millones de euros de financiación verde.

Este el último de una serie de préstamos verdes en los últimos 12 meses, destacando uno de 1.000 millones de euros de la tecnológica holandesa Philips Electronics y uno de 800 millones de euros de Red Eléctrica. El acuerdo eleva el volumen de préstamos verdes sindicados en Europa a alrededor de 15.000 millones de euros, dijo un banquero de alto rango.

Los préstamos con certificación verde permiten que las empresas lleguen a un grupo creciente de inversores, al tiempo que los bancos pueden demostrar su compromiso con negocios sostenibles y socialmente responsables.ris.