Sergio Rodríguez se reivindica y Marc vuelve a perder

Los Trail Blazers ganaron el sábado 100-87 su partido de NBA contra los Wizards, contando con 12 puntos de Sergio Rodríguez y cinco de Rudy Fernández.

Liderados por los 22 de Brandon Roy, los anfitriones se impusieron al equipo de Washington, y aunque Caron Butler sumó 31 puntos al marcador de los Wizards, Portland llegó a ponerse 22 puntos por delante.

A su vez, en Memphis, los Grizzlies perdieron ante los New York Nets por 99-88, pese a los 23 puntos de OJ Mayo. Marc Gasol aportó otros 11, además de 10 rebotes y tres asistencias.

El entrenador provisional de Memphis, Johnny Davis, perdía así su segundo partido al mando del equipo desde el despido de Marc Iavaroni. Se espera que el domingo se presente a la prensa al nuevo técnico, Lionel Hollins.

Brook Lopez lideró a los Nets con 23 puntos, secundado por otros cuatro jugadores con dobles dígitos.

En otros partidos, los Miami Heat pusieron fin a su racha de 10 derrotas al vencer en casa a los Orlando Magic por 103-97 con 27 puntos de Dwyane Wade.

El máximo encestador de la NBA sumó ocho rebotes y seis asistencias, mientras los Heat contuvieron en el último cuarto una remontada de sus rivales en la División Sudeste.

"Éste era un partido que queríamos ganar", dijo Wade a los periodistas. "Queríamos demostrarnos a nosotros mismos que podemos jugar con los equipos de élite", agregó.

Mario Chalmers marcó 20 puntos y Udonis Haslem anotó 12, entre ellos cuatro en el disputado último cuarto.

Orlando, que perdió el jueves ante Boston Celtics, fue liderado por Dwight Howard y Rashard Lewis. Howard convirtió 22 tantos y capturó 10 rebotes, en tanto Lewis sumó 21 unidades.

"La principal razón por la que perdimos es porque ellos jugaron bien", dijo el técnico de los Magic, Stan Van Gundy. "Yo creo que los Heat mostraron un tremendo juego ofensivo", agregó.

Howard, expulsado justo antes del final del encuentro por su segunda falta técnica, elogió la contribución de Wade.

"Ha estado muy rápido esta noche", dijo a los periodistas. "No fue sólo rápido. Iba a 200 kilómetros por hora. Era difícil estar frente a él", añadió.