Se trataba de la comparecencia más esperada tras el plante de la semana pasada. José Mourinho entraba sonriente a la sala de prensa de Mestalla. Pero pronto iba a torcer el gesto. Lo hizo sobre todo para referirse a los periodistas. El entrenador del Real Madrid insinúo que la prensa de Madrid no quiere que su equipo triunfe. 'Mi amigo Messina y yo tenemos mucha dudas de si la prensa de Madrid quiere que el Madrid gane'.

Fue el momento más tenso de la comparecencia, en la que no quiso adelantar el once con el que se enfrentará mañana en la final de la Copa al Barcelona. Sin embargo, sí que ha avanzado que su equipo partirá con un 4-3-3 y que jugará con un delantero centro. 'Para no decir lo mismo que Pep' -Guardiola dijo que jugará 'Pinto y diez más'-, adelantó que jugarán 'Sergio Ramos y diez más'. El portugués, más parco en palabras y comedido que de costumbre, prevé una final 'equilibrada' sin favoritos. Ha restado importancia a las críticas por su planteamiento, sobre el papel, defensivo. 'El partido de mañana no tiene nada que ver con el partido del sábado', quiso matizar.  Saldrán a atacar y a marcar, dice. Sin pelota 'defenderán los once'.

Mourinho ha reivindicado, como es costumbre en él, su labor como técnico del Madrid, al conseguir en su primer año la primera final.  'Pienso que me escogieron por mi profesionalidad. Conmigo la gente trabaja serio y eso es importante para llegar al éxito'. No obstante, consciente de las dificultades que entraña el equipo de Pep Guardiola, quita hierro a su primera final con el Madrid y mira hacia el horizonte más allá de lo que ocurra mañana en Mestalla. 'Si lo conseguimos mañana óptimo, si no; la vida continúa'.

Apuesta en la porra de Público.es por el resultado de la final de Copa