La falta de acierto ofensivo deja al Barça sin final

El Barcelona Regal no disputará su octava final de la máxima competición continental tras caer hoy contra todo pronóstico ante el Olympiacos griego (68-64), en un mal partido del equipo español, al que le condenó su falta de acierto en el tiro y la gran actuación de Spanoulis, máximo anotador del choque con 21 puntos y protagonista en los momentos decisivos.

El Barça empezó fallando sus cinco primeros lanzamientos y Olympiacos le endosó un 8-0 inicial, con dos triples de Spanoulis y Mantzaris incluidos, que el conjunto azulgrana fue arrastrando durante todo el encuentro.

El nefasto arranque de los catalanes fue toda una premonición y el guión que menos deseaba su técnico, Xavi Pascual, quien advirtió que un mal inicio podría dar al traste con sus aspiraciones de pelear por el título.

Dirigido magistralmente por Spanoulis, los del Pireo mantuvieron la renta al final del primera cuarto (17-11), gracias a su buena defensa, que provocó hasta seis pérdidas de balón de los españoles en este primer período. El Barça seguía atascado en ataque -0 de 7 en triples hasta que Wallace hizo el primero mediado el segundo cuarto- pero lograba mantenerse en el partido gracias al dominio del rebote ofensivo.

Hasta una docena capturaron los azulgranas en la primera mitad

Hasta una docena capturaron los azulgranas en la primera mitad, lo que unido a un defensa creciente les permitió incluso darle la vuelta al marcador cuando por fin despertó Navarro con cinco puntos consecutivos (26-17, min.17). Sin embargo, la ventaja solo le duró unos segundos, los que tardó Spanoulis en cruzar la pista y lograr una jugada de 2+1, una acción que se repitió varias veces durante el choque.

Una canasta de N'Dong y dos espectaculares acciones de Dorsey llevaron el partido al descanso con ventaja helena (33-29). El Barcelona había hecho una más que discreta primera mitad, pero la buena noticia para los de Pascual es que solo perdían por cuatro.

Olympiacos también salió mejor tras la reanudación y entre Spanoulis y Printezis recuperaron rápidamente la máxima ventaja helena (39-31, min.22). Entonces, Pascual echó mano de Vázquez, que anotó, reboteó y asistió para mantener a su equipo en el partido (43-41, min.26).

En ataque, solo Lorbek acompañaba tímidamente al pívot azulgrana

Sin embargo, en ataque, solo Lorbek acompañaba tímidamente al pívot azulgrana, porque a esas alturas del choque, la defensa de ayudas planteada por Ivkovic ahogaba a Navarro, Eidson estaba desaparecido en combate y Mickeal mantenía una dura pelea con el aro de la que siempre resultaba perdedor.

El Barça, seguía sin encontrar la fluidez necesaria en ataque, pero había llegado vivo al último cuarto (50-47). Navarro tomó la responsabilidad en este período y su equipo se puso de nuevo a dos puntos de Olympiacos (56-44, min.33).

Pero cuando no era un triple de Spanoulis, era otro de Printezis o un mate de Dorsey los que frenaban la reacción del conjunto azulgrana, que encaró el tramo decisivo de nuevo siete abajo (63-56, min.37).

La última opción del Barça llegó desde la línea de tiros libres. Así anotó sus últimos ocho puntos del partido. Con 66-64, N'Dong falló el último de ellos y la pelota cayó en las manos de Huertas, que, a falta de 38 segundos para el final, se jugó un triple que bien podía valer una final. Pero fue uno de los 19 que los azulgranas fallaron esta noche en Estambul -solo metieron 3- lo que confirma que, para ganar la Euroliga, no basta con ser la mejor defensa de Europa.