El Barcelona anuncia una acción judicial por la incautación de camisetas amarillas en la final de Copa contra el Sevilla

El Barcelona anunció este lunes el inicio de una acción judicial en los tribunales para reclamar una respuesta a la Delegación del Gobierno en Madrid y a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) por la incautación de camisetas con mensajes políticos a aficionados del club en la final de la Copa del Rey disputada en Madrid contra el Sevilla el 21 de abril.

En la rueda de prensa posterior a la reunión ordinaria de la Junta Directiva, el portavoz, Josep Vives, anunció esta decisión después de que el club barcelonés no haya recibido respuesta alguna a la carta que envió hace unas semanas a la Delegación del Gobierno y a la RFEF pidiendo explicaciones por lo sucedido en la final disputada en el Wanda Metropolitano.

"El club ya no se marca más plazos. Hizo una pregunta a la Delegación del Gobierno y a la RFEF. Esta respuesta la exigiremos en los tribunales. Enviamos una carta por escrito, pero no hemos obtenido respuesta; hemos obtenido silencio, y lo que exigimos es una respuesta. Lo exigiremos a través de la justicia", remarcó Vives.

En la final copera contra el Sevilla, los agentes de seguridad del Wanda Metropolitano incautaron 199 camisetas con mensajes políticos, la mayoría de ellas de color amarillo, una decisión que el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, justificó en cumplimiento de la Ley del Deporte y del reglamento de la RFEF.

En la comparecencia, el Barcelona informó también de los archivos sin sanción de los expedientes abiertos por la UEFA ante la exhibición de banderas independentistas en los partidos de la Liga de Campeones disputado en el Camp Nou ante el Atlético de Madrid (2015-16), el Manchester City y el Celtic de Glasgow, del curso 2016-17.

Red de falsificación de entradas

Por otra parte, el Barcelona detectó una total 2.823 de entradas falsificadas en el último Clásico contra el Real Madrid en el que estuvieron involucrados socios abonados del club, una acción organizada que se tradujo en unas pérdidas de 1,5 millones de euros, según informó este lunes el portavoz del club, Josep Vives.

Tras la reunión ordinaria de la Junta Directiva celebrada este lunes, el club barcelonés denunció la existencia de una "red organizada" que afecta a 2.823 socios titulares con un abono en el Camp Nou.

Según anunció Vives, a las personas afectadas se les suspenderá la condición de socio y abonado de manera temporal a la espera de que se tome una decisión definitiva que podría significar la expulsión definitiva como miembro del club.

"Son entradas falsificadas en base a unos abonos. Eso quiere decir que hay una red que ha implementado una tecnología para hacer eso y se necesitan medios. Estamos hablando del 3,4% de abonos", lamentó Vives.