La cantante y actriz Whitney Houston ha fallecido a los 48 años en Los Ángeles tras una vida en la que las drogas y un conflictivo matrimonio terminaron por hundir su carrera, una de las más exitosas de una artista femenina en la historia de la música.

Su muerte ha tenido lugar en el hotel Beverly Hilton, en Beverly Hills, por causas que aún se están investigando. Una persona del numeroso séquito de la cantante se percató de que Houston estaba inconsciente en la bañera de su suite antes de las 15.30 hora local (23.30 GMT), momento en el que se alertó a los servicios de emergencia.

A pesar de la rápida respuesta de los paramédicos, que trataron de reanimarla durante cerca de 20 minutos, Houston ha sido oficialmente declarada muerta poco antes de las 16.00 hora local (00.00 GMT). La cantante había reservado una habitación en ese hotel porque iba a acudir a la fiesta que había organizado esta noche el productor musical Clive Davis, quien precisamente descubrió a la diva. Un evento anual que reúne a muchas estrellas de la canción y que se celebra en la víspera de la gala de entrega de los Grammy, que este año sin duda estarán marcados por el fallecimiento de Houston, ganadora de seis galardones de los premios equivalentes a los Oscar en el mundo de la música.

A pesar del súbito final de la vida de Houston, el festejo en el hotel Beverly Hilton, el mismo que acoge la comida de los nominados de los Óscar y la ceremonia de los Globos de Oro, no se ha suspendido, aunque Davis ha cancelado su asistencia tras lo sucedido.

La madre de la artista, Cissy Houston, ha dicho que había hablado con su hija minutos antes de que fuera hallada inerte en su cuarto y, sin embargo, no percibió nada fuera de lo normal, según TMZ.

Houston fue una de las voces más populares de las décadas de los 80 y 90. Comenzó su carrera profesional en 1985 con un primer LP por el que obtuvo 40 discos de oro y se consagró como estrella internacional gracias al tema I Will Always Love You, que interpretó para la película The Bodyguard (1992), cinta que protagonizó junto con Kevin Costner y que supuso su debut cinematográfico. Los más de 140 millones de copias que vendió con sus álbumes la convirtieron en la artista más exitosa de todos los tiempos, certificada por el Libro Guinness de los Récords.

Whitney Houston estaba intentando relanzar su carrera desde 2009 cuando sacó I Look To You, su primer álbum de estudio desde 2002 con el que intentaba dejar atrás a un período de silencio. Aquel año, la cantante confesó públicamente su tormento personal en el programa de la popular presentadora de televisión Oprah Winfrey donde afirmó estar recuperada de sus adicciones de marihuana y cocaína, aunque admitió sentir la tentación de volver a consumir. La drogadicción de Houston se asoció con su complicado matrimonio con el también cantante Bobby Brown, con quien se casó en 1992, en el momento cumbre de su carrera, tuvo una hija, Bobbi Kristina, y de quien se divorció en 2007.

A pesar de sus esfuerzos por rehabilitarse en los últimos tres años, Houston nunca recuperó la voz que la hizo brillar y su gira mundial en 2010 para presentar su último disco fue un desastre. Muchos fans salían de los conciertos antes de que concluyesen, mientras otros optaban por abuchearla, incapaz de llegar a los agudos que la hicieron famosa. En mayo de 2011 volvió a someterse a un tratamiento de desintoxicación y durante estos los últimos días se la vio en varias fiestas e incluso fue fotografiada en aparente mal estado saliendo de un bar en Hollywood.