Once pasajeros de un avión de la compañía Vueling que salía de Barcelona con destino a Dakar (Senegal), en el vuelo VY7888, elegidos al azar, se han quedado sin poder viajar por haber protestado en contra de la deportación de una persona que iba esposada en el mismo avión, acompañada de dos policías de paisano.

Vueling ha expulsado al azar algunos de los pasajeros que espontáneamente habían manifestado su solidaridad con el pasajero esposado, pero el vuelo ha salido y la deportación se ha llevado a cabo.

Una pasajera, con la que ha podido hablar Público, explicó que después de oír ruido en la parte trasera del avión, preguntaron al piloto por el que estaba pasando y él mismo les confirmó que se trataba de un caso de deportación.

Ante su protesta y la de muchas otras personas del mismo pasaje, vieron como hacían bajar a la persona esposada. Poco después todos fueron obligados a abandonar el avión. "Mucha gente estamos de pie parando este vuelo de la vergüenza", decía uno de los pasajeros desde redes sociales antes de bajar.

Agentes de la Guardia Civil han identificado once de los pasajeros y pasajeras que se habían interesado por el caso, contra algunas de las que el piloto ha puesto una denuncia y manifestó que no quería realizar el vuelo con este grupo.

Algunos de ellos, a través de redes sociales, habían denunciado la expulsión de una persona migrante, que consiguieron parar durante un rato, aunque finalmente ha sido obligado a viajar hacia Senegal en el avión que ha dejado en el suelo once las personas que habían protestado por la deportación.