El presidente del PNV, Íñigo Urkullu, ha asegurado hoy que ETA, con el atentado de ayer el Getxo (Vizcaya), "ha querido condicionar" la reunión que mañana mantendrá el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zaatero, y el lehendakari Juan José Ibarretxe en el Palacio de la Moncloa.

Urkullu se ha referido a la explosión de una furgoneta-bomba en la zona del paseo marítimo de Getxo (Vizcaya), que causó importantes daños materiales, después de declarar como testigo ante el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, en relación con la causa que investiga el pago del impuesto revolucionario.

Una vez más, ha señalado el dirigente del PNV, "la sinrazón de ETA persigue condicionar la convivencia y la política vasca" y "el propósito de una acuerdo político", en referencia a la entrevista que tendrán Zapatero e Ibarretxe, el cual "corresponde solamente a las fuerzas políticas y a las instituciones, sean del Gobierno de España o del Ejecutivo vasco".

Ha recalcado que la banda terrorista "pretende erigirse en juez de los que no ceden al chantaje y a la extorsión y también en juez de la vida política".

Sobre la cita de mañana en el Palacio de la Moncloa, ha expresado su confianza en que los dos líderes lleguen a un acuerdo que permita abordar "una segunda transición" en el País Vasco porque, en su opinión, el autogobierno "no se ha desarrollado ni en el espíritu ni en la letra".

Ibarretxe, ha asegurado Urkullu, acude a la entrevista con un "espíritu abierto" y ha dicho esperar las misma actitud por parte de Zapatero.

El presidente del PNV ha restado importancia a la resolución aprobada por el Parlamento vasco el pasado día 16, en la que acusa al Gobierno de amparar a las fuerzas policiales ante las denuncias de torturas o malos tratos de detenidos, y no cree que tenga consecuencias negativas en el encuentro entre Zapatero e Ibarretxe.