Tijuana registra 13 muertes en la madrugada y México supera el millar en 2008

La ola de violencia desatada por el crimen organizado en México se cobró hoy al menos 13 víctimas mortales en Tijuana, ciudad fronteriza con Estados Unidos, lo que agrava una situación que en lo que va de 2008 ha dejado más de un millar de muertos.

Los primeros datos oficiales de las autoridades municipales de Tijuana y estatales de Baja California señalan que las víctimas son en su mayoría presuntos sicarios, y que hay cinco personas más que resultaron heridas.

Los hechos sucedieron en tres enfrentamientos entre bandas y uno contra policías ocurridos esta madrugada en varios puntos de Tijuana, noroeste de México, indicaron en rueda de prensa las autoridades.

El procurador de Justicia del estado, Rommel Moreno Manjarrez; el titular de Seguridad Pública del estado, Daniel de la Rosa Anaya, y el comandante de la policía municipal, teniente Julián Leyzaola, informaron de que los heridos y tres personas más han sido detenidas.

Pese a que horas antes se había indicado que los fallecidos eran 15, las fuentes estatales evitaron confirmar si había más víctimas mortales posiblemente retiradas de la zona por otros miembros de los grupos al margen de la ley.

"Hay mucha especulación, mucha información preliminar, no se puede aseverar (eso)", apuntó el fiscal Moreno Manjarrez.

En el lugar de los hechos fueron hallados más de 1.500 casquillos de fusiles AK-47 y de otros calibres, así como cargadores, munición, chalecos antibala y otras prendas.

Además, 21 vehículos sospechosos de haber sido utilizados en los ataques fueron confiscados.

Al parecer, el primero de los choques se produjo de madrugada en el fraccionamiento Mariano Matamoros, al este de la ciudad, cuando dos grupos de individuos, al parecer vinculados al cartel de los hermanos Arellano Félix, se enfrentaron entre sí.

Las acciones continuaron por otras áreas de Tijuana, entre éstas Villa Floresta, un centro comercial conocido como "Macro Plaza", y cerca del panteón "Monte de los Olivos".

Datos extraoficiales señalan que uno de los grupos involucrados trató de que se le proporcionara atención médica a uno de sus heridos en un hospital del este de la ciudad y, tras ser rechazados, abrieron fuego contra la clínica.

Luego se dirigieron al otro extremo de la ciudad, a una clínica privada, y allí se enfrentaron a balazos contra elementos de la Policía Estatal Preventiva de Baja California.

Por el momento, con la ciudad en alerta y patrullajes intensos de militares, se desconoce la identidad de los fallecidos y de los heridos, pero se presume que podría haber personas no ligadas al crimen organizado.

Los enfrentamientos de hoy han sido de los más graves de los últimos meses en México, donde en lo que va de año la ola de violencia se ha cobrado la vida de 1.020 personas, según datos extraoficiales que hoy publica el diario El Universal.

Los hechos se han desencadenado en una semana convulsa en Baja California tras la denuncia del general encargado de la II Región Militar del Ejército Mexicano, Sergio Aponte Polito, de la presunta corrupción que existe entre la Policía y los funcionarios del estado con el narcotráfico.

En una extensa carta hecha pública el pasado martes, el mando de la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) que apoya el combate al crimen organizado en la zona, denunció dejación de responsabilidades en la fiscalía bajacaliforniana en la investigación de homicidios, robos y secuestros.

Tras conocerse la misiva el gobernador de Baja California, José Osuna, prometió acometer una depuración policial mientras que el general Aponte se dijo dispuesto a mejorar la coordinación con las autoridades de Baja California.