Este artículo se publicó hace 15 años.
Suben a 269 los de muertos por el tifón Parma en el norte de Filipinas
Las autoridades de Filipinas elevaron hoy a 269 la cifra de personas muertas a causa de las avalanchas e inundaciones ocurridas esta semana en la isla de Luzón, al paso del tifón "Parma" por el norte del archipiélago.
Según el Consejo Nacional para la Coordinación de Desastres, al menos otros 49 personas permanecen desaparecidas bajo toneladas de lodo de los corrimientos que afectaron a más de una decena de aldeas de las provincias de Benguet y la vecina de Baguio, a unos 250 kilómetros al norte de Manila.
El portavoz del consejo, teniente coronel Ernesto Torres, indicó que el valor de los daños materiales causado por el tifón "Parma" asciende a unos 5.000 millones de pesos (107 millones de dólares), el doble del calculado en un principio.
El jefe de Policía de Benguet, Loreto Espinelli, precisó que casi la totalidad de las víctimas confirmadas en la provincia perecieron sepultadas por las avalanchas.
En estas dos áreas de la isla de Luzón han sido localizados los cadáveres de unas 220 personas, según Protección Civil.
El resto de las personas murieron en corrimientos de tierra sucedidos el miércoles y jueves pasados en pueblos, ubicados casi todos en laderas de montes desforestados de las provincias de La Unión, Pangasinan, Ilocos del Norte, Ilocos del Sur, Nueva Écija, Quezón y Camarines del Sur.
En la búsqueda de personas y la retirada de las toneladas de tierra que bloquean el acceso de vehículos a algunas de esas aldeas, participan el Ejército filipino y militares estadounidenses con base en la isla de Mindanao, en el sur del archipiélago.
"Las operaciones de búsqueda de personas desaparecidas continúa, y con el apoyo de los helicópteros se suministran alimentos y otras necesidades a las poblaciones que han quedado aisladas por carretera", dijo el teniente coronel Torres.
Además de avalanchas en las áreas montañosas, las copiosas lluvias descargadas por el tifón causó el desbordamiento de ríos y embalses, con sus consiguientes inundaciones, sobretodo en la provincia de Pangasiman, en la que unas 50.000 personas han sido evacuadas de diversas aldeas situadas en la planicie.
Las lluvias afectaron a gran parte de la meseta central de Luzón, destruyeron las escasas infraestructuras, bloquearon carreteras e inundaron vastas extensiones de arrozales, que proveen el sustento básico para los habitantes pobres de la región.
Además otras 25 personas perdieron el pasado fin de semana cuando el "Parma" alcanzó el norte de Filipinas, con vientos de 200 kilómetros por hora.
A finales del pasado septiembre, la tormenta tropical "Ketsana", vertió en apenas unas horas sobre Manila y otras 25 provincias de Luzón una cantidad de lluvia muy superior a la media mensual en esta época del año, batiendo el anterior récord de 1967.
El tifón "Ketsana" inundó el 80 por ciento de la capital y causó 337 muertos, cerca de 500.000 desplazados, unos 2,5 millones de afectados y pérdidas multimillonarias por las infraestructuras destrozadas y cultivos transformados en lodazales.
Los expertos de las agencias internacionales han identificado el chabolismo como el principal factor de estos desastres naturales que sufre el país, y que evidencian el pésimo estado de sus infraestructuras, así como la falta de preparación y medios de los que cuenta la Administración para responder a las emergencias.
Entre 15 y 20 tifones y un sinfín de temporales y sistemas de baja presión suelen pasar cada año por Filipinas durante la estación lluviosa, que transcurre entre junio y noviembre.
En Filipinas, ocurren además cada año decenas de avalanchas de tierra, y por estar situada en el llamado "Anillo de fuego" está expuesta a fuertes terremotos y erupciones volcánicas.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.