"Soy una 'friki' de la ciencia"

La actriz Dana Delany ha dejado de ser una de las Mujeres desesperadas para convertirse en una forense que se siente más cómoda con los muertos que con los vivos. Delany decidió abandonar el papel de Katherine Mayfair, que interpretó durante cuatro temporadas, para meterse en la piel de la doctora Megan Hunt, la protagonista de la serie El cuerpo del delito.

Esta producción de Disney se verá antes en España que en Estados Unidos, ya que Fox la estrenará en nuestro país el próximo día 18 (22.50 horas). Además, Cuatro ha adquirido los derechos para su emisión en abierto.

Su personaje tiene que aprender a actuar como "un ser humano"

El cuerpo del delito relata la historia de una neurocirujana cuya vida se derrumba por las secuelas de un accidente de coche. Tendrá que reconvertirse en forense y aprender a vivir sin tener contacto con su marido y su hija, a los que desatendió por concentrarse en su carrera profesional. "Megan Hunt es muy arrogante. Lo ha perdido todo y está en una crisis de vida. Tiene que aprender a ser un ser humano, porque ha pasado tanto tiempo preparándose para su profesión que se ha convertido casi en una autista", relató esta actriz durante la visita que realizó a España esta semana.

Además de tener problemas para relacionarse, Megan Hunt es "más obsesiva" de lo habitual y está "demasiado vinculada" a los fallecidos. "Un forense normal tiene que desconectar, no puede tener un vinculo personal con los cadáveres", explica Delany, quien considera que su personaje está tratando de redimirse a través de su nuevo empleo. "Habla de esos cadáveres como si fuesen sus pacientes y eso es un error. Intenta honrar su vida y ayudarles a pasar al otro lado". En la raíz de este extraño comportamiento está su educación, ya que "no fue criada para saber cómo relacionarse con las personas y lo único que aprendió fue a trabajar".

Cuatro también ha comprado los derechos de esta serie

La oferta para protagonizar El cuerpo del delito pilló a Delany por sorpresa, pero decidió aceptarla porque detesta "entrar en la rutina" y porque le permitía satisfacer una afición que mantiene oculta. "Soy una friki de la ciencia en secreto y el poder aprender cosas relacionadas con la medicina me pareció muy interesante", relata.

Para esta nueva producción tuvo que cambiar de forma radical de registro, ya que Mujeres deseperadas estaba cargada de emociones, mientras que en esta nueva serie todo está "más controlado" y es "más intelectual".

Pero Delany no sólo ha tenido que aprender a vivir la ficción de otra manera, sino que ha cambiado también su rutina diaria. En Mujeres desesperadas el reparto era muy amplio y sólo trabajaba dos o tres días por semana, y en esta ficción se pasa 15 horas al día rodando. "Al igual que mi personaje, no tengo vida. Es física y mentalmente agotador", confiesa.

Sin embargo, Delany afirma sentirse "muy afortunada" de seguir trabajando a sus casi 55 años, porque hay actrices de su edad que se quejan de la falta de papeles. "Hice la serie Playa de China cuando era joven y allí aprendí lo buena que era la televisión para las mujeres. Creo que los guionistas escriben mejor material. Cuando iba a hacer una película siempre era la novia o la esposa y no eran papeles complejos", concluye.