Un grupo de piratas somalíes ha secuestrado un atunero español en el océano Índico, informaron el viernes la consejería de Pesca del Gobierno vasco y los captores.

Aviones luxemburgueses sobrevolaron la zona donde faenaba el "Alakrana" cuando el pesquero no hizo la llamada rutinaria de contacto y vieron hombres armados a bordo, dijo a Reuters un portavoz del Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial, Agricultura y Pesca del País Vasco.

Una fuente en el refugio pirata de Haradheere, al norte de la capital somalí, Mogadiscio, confirmó que el barco había sido secuestrado.

"Nuestros amigos de Kismayu secuestraron un pesquero con su tripulación ayer por la noche", dijo un pirata de nombre Hasan a Reuters por teléfono. "Se dirigen a Haradheere. Ningún barco de guerra puede pararnos".

El Alakrana, con una tripulación de 36 personas y sede en Bermeo (Vizcaya), apareció en los medios españoles la semana pasada cuando su capitán describió cómo el mal tiempo les había permitido escapar de un ataque pirata anterior.

El Gobierno español afirmó que tratarán de que la situación se resuelva cuanto antes.

"La prioridad absoluta del Gobierno es preservar la seguridad de la tripulación, y van a contar con todos nuestros esfuerzos", afirmó la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, al finalizar el Consejo de Ministros.

Por la tarde se produjo la primera reunión de la comisión creada por el Gobierno y presidida por De la Vega para coordinar las acciones encaminadas a liberar el pesquero, en la que se acordó abrir un canal de comunicación con las autoridades somalíes "y evaluar las distintas iniciativas que se están adoptando, tanto de carácter diplomático como operativo, para la liberación del pesquero".

Hacia la zona se dirige también la fragata española Canarias.

Las cofradías de pesqueros vascos llevaban tiempo pidiendo al Gobierno que autorizara la presencia de soldados españoles en los pesqueros, ante el aumento en los ataques.

ADVERTENCIAS

Los ataques piratas han continuado pese a las patrullas internacionales en las aguas del país del Cuerno de África. Las lluvias monzónicas en los últimos meses redujeron el número de asaltos, pero ahora han comenzado de nuevo.

La guardia costera de las Seychelles dijo que el barco estaba a 400 millas náuticas al noroeste de Mahe, la isla más grande y desarrollada del archipiélago, donde tienen su base muchos atuneros españoles y franceses.

Las capturas de atún en el suroeste del océano Índico han caído hasta un 30 por ciento el año pasado por el bloqueo que los piratas han hecho del acceso a algunos de los caladeros más ricos.

El Ministerio español de Defensa dijo que el barco secuestrado faenaba lejos de la zona de seguridad de la UE, según medios.

La mayoría de la tripulación es de nacionalidad española, aunque también hay un originario de Seychelles. El resto procedían de Indonesia, Costa de Marfil, Madagascar y Senegal, según la guardia costera.

"El comité responsable de la piratería está en contacto con los propietarios del barco y ha establecido contacto con otras fuerzas antipiratería en la región para dar una respuesta al incidente", dijo en un comunicado.

algunas compuestas por ex pescadores enfadados por con la presencia de pesqueros en sus aguas - han logrado decenas de millones de dólares en rescates al secuestrar a barcos que hacen su ruta entre Europa y Asia.

Los piratas atacaron atuneros al menos en tres ocasiones el año pasado, consiguiendo pagos de más de un millón de euros en rescates.

La industria atunera genera hasta 6.000 millones de dólares en la región del océano Índico. En julio, Francia desplegó 30 oficiales de marina en su flota atunera contra los piratas.