Un "San Fernando" de Murillo atacado por un desequilibrado no sufre daños

Un cuadro de Murillo que representa al rey San Fernando, expuesto en la catedral de Sevilla, no ha sufrido daños pese a los dos golpes que le propinó un desequilibrado que aseguraba que se trataba de una obra propiedad de su familia.

La agresión, que se ha conocido ahora, ocurrió a mediodía del pasado 14 de junio, cuando un hombre de 66 años identificado como T.M.V. entró en la zona expositiva de la catedral y dio dos golpes al cuadro, tras lo cual intentó huir pero fue retenido por los empleados de seguridad del templo.

El hombre quedó retenido hasta la llegada del Grupo Giralda de la Policía Local, especializada en la vigilancia del centro turístico.

Francisco Navarro, delegado de Patrimonio de la catedral de Sevilla, ha explicado hoy a Efe que inmediatamente el cuadro fue revisado por expertos del templo y por una restauradora que trabajaba en las inmediaciones, quienes comprobaron que los daños no eran importantes.

"La tela, al estar un poco reseca, quedó ligeramente hundida pero se ha recuperado sin intervención", ha asegurado Navarro, quien ha precisado que, pese a ello, el cuadro será sometido a un nuevo examen dentro de unos meses.

Se trata de un lienzo datado en 1671 obra de Bartolomé Esteban Murillo que representa al rey Fernando III con una espada y una bola del mundo y que recibió los golpes en la esquina inferior izquierda y en la capa de armiño del rey.

Según los testigos presenciales, el desequilibrado entró en la zona de la catedral denominada Pabellón, donde se exponen algunos de sus cuadro más valiosos, aprovechando la entrada de turistas y se saltó el cordón de seguridad que rodea todos los lienzos.

El perturbado afirmaba que el cuadro "era demasiado perfecto y que pertenecía a su padre", según los testigos.

El responsable de Patrimonio ha recordado que la Pinacoteca de la catedral de Sevilla tiene más de 800 cuadros, de los cuales 16 son de Murillo y entre ellos los que representan a los ocho santos nacidos en Sevilla, expuestos en su mayoría en la Sala Capitular.

A juicio de Navarro, aunque todas las medidas de seguridad "tienen lagunas", las existentes en la catedral de Sevilla se pueden considerar suficientes pues el desequilibrado fue detectado enseguida por el personal, las cámaras de grabación y las medidas estáticas mediante rayos infrarrojos.

Ha destacado que la catedral de Sevilla ha registrado este año un 13 por ciento de incremento de turistas respecto al año pasado, cuando contabilizó un millón y medio de visitantes.