Barcelona, 4 feb (EFE).- La multinacional energética Naturgy perdió 347 millones de euros el año pasado, frente a las ganancias de 1.401 millones de 2019, por la crisis de la COVID-19, que redujo tanto la demanda energética como los precios, y por una revisión de valoración de algunos activos con un impacto de 1.363 millones.

Naturgy precisa que, sin este impacto, que afectó a la generación convencional en España (1.145 millones de euros) y a las actividades de gas en Argentina (198 millones), su beneficio neto ordinario se habría situado en 872 millones, un 36,7% inferior al de 2019.

En un comunicado, Naturgy ha justificado esta revisión de activos, llevada a cabo durante el último trimestre de 2020, para proporcionar "una valoración de sus activos más transparente y ajustada al escenario energético actual".

Naturgy está inmersa en la preparación de su nuevo plan estratégico para los próximos años, pero el centro de atención está puesto actualmente en la opa anunciada recientemente por el fondo australiano IFM por el 22,7% de la compañía, que deberá obtener el visto bueno del Gobierno antes de plantearse formalmente a los accionistas.

La multinacional ha detallado que su beneficio bruto de explotación o ebitda alcanzó los 3.449 millones en 2020, un 18,9 % menos que en 2019, si bien esa magnitud a perímetro constante sería de 3.964 millones, aclara Naturgy, por lo que la compañía da por cumplido su objetivo de situarlo en torno a los 4.000 millones.

La antigua Gas Natural Fenosa admite que 2020 fue uno de los ejercicios "más complicados" debido al "fuerte impacto" derivado de la COVID-19, que desplomó la demanda energética y produjo una "depreciación relevante" en países clave de América Latina.

El año pasado Naturgy vendió el 96 % de su participación en la chilena CGE y pactó su salida de Egipto y la resolución del conflicto por la planta egipcia de Damietta, y en paralelo aumentó su inversión en renovables en países como Australia, España, Brasil o Chile y adquirió una cartera de proyectos de 8 gigavatios en energía solar y de 5 GW en almacenamiento en EEUU.

Con todo, las inversiones sumaron 1.279 millones en 2020, un 24,1 % menos que en 2019, si bien la compañía resalta que un 60 % de las inversiones se destinó a crecimiento.

Al mismo tiempo, la multinacional española siguió recortando deuda neta, que ahora suma 13.612 millones, un 10,8 % menos, y todo ello sin reflejar aún los ingresos antes de impuestos de 2.570 millones esperados al cierre de la venta de CGE Chile.

Por actividades, la de gestión de energía y redes, la principal de la multinacional, aportó 2.859 millones al ebitda, un 21 % menos, y también cayó un 20,7 % el área de comercialización, que aportó 326 millones, de forma que solo el área de renovable y nuevos negocios creció, en este caso un 6 %, hasta los 352 millones de contribución al ebitda.

En un comunicado, el presidente de la compañía, Francisco Reynés, ha señalado "la capacidad de adaptación que ha demostrado Naturgy en este difícil contexto y cómo la compañía ha destacado en el escenario energético a nivel internacional frente al resto de competidores, gracias a su crecimiento en tecnologías limpias y su apuesta por nuevos negocios".