Un procesado por la "operación Nova" ve su acusación como una "conspiración" de los directores de las cárceles

Uno de los treinta acusados en la "operación Nova," que planeaban atentar contra la Audiencia Nacional en 2004, ha dicho hoy que las cartas halladas en su celda dirigidas a otro de los procesados son fruto de una "conspiración" de los directores de las cárceles en las que ha estado recluido.

Dibali Abdellah, más conocido como Adila Mimon al que la Fiscalía acusa de liderar el grupo formado en la prisión gallega de A Lama, ha negado conocer al presunto jefe de la célula Mohamed Acrhaf, ser uno de sus hombres de confianza y haber mantenido correspondencia con él, al que, según ha afirmado, ha conocido en este juicio.

Según los fiscales Pedro Rubira y Dolores Delgado, Abdellah mantenía una "relación epistolar" con Acrhaf, que le había adoctrinado junto a otros acusados en la cárcel salmantina de Topas, y en una de esas cartas le envió una fotografía en la que aparecía él con cuatro personas que formaban el "grupo salafista".

"Yo no he mandado ninguna carta. Ni siquiera tuve en mi posesión esa fotografía", ha señalado el acusado, tras lo que ha reconocido haber recibido cartas de Mohamed Amine Salameh y Nidal Ayyad -ambos condenados en Estados Unidos por un ataque al World Trade Center en Nueva York en 2003- pero a los que no ha contestado.

Esas misivas fueron halladas en su celda de la cárcel de A Lama junto a otra que le escribió el acusado Abdelkrim Bensmail, aunque Abdellah, que se enfrenta a una petición de 13 años de prisión por integración en organización terrorista en calidad de dirigente, ha afirmado que no le conoce y que nunca ha recibido una carta suya.

"Pensé que los directores de Topas y A Lama han conspirado contra mí", ha sostenido el procesado, que ha relatado que cuando estaba en la prisión salmantina el director "iba contra" él porque se dejó crecer la barba, llevaba chilaba y rezaba.

Según el acusado, el responsable de Topas envió un informe al de A Lama y por eso aparecieron cartas en su celda que no eran suyas, así como un mapa de Madrid en el que había anotaciones de edificios emblemáticos de la capital, como la estación de Atocha, el Tribunal Constitucional o la sede del PP situada en la calle de Génova.

Además, ha recordado que no estuvo presente en el registro de su celda y que la compartía con otra persona.

Tras asegurar que no conoce a la mayoría de las personas que se sientan en el banquillo, Abdellah ha negado además haberse carteado con los procesados Majid Mchmacha y Eddebdoudi Taoufik a través del también encausado Baldomero Lara, aunque este último ha admitido esta mañana haber recibido cartas a su nombre que iban dirigidas a Adila Mimon.