Rodrigo Cortés es un tipo en constante proceso de creación. No sólo le delata su currículum cinematográfico (Concursante, Buried, Luces Rojas -con Robert de Niro y Sigourney Weaver-, además de multitud de trabajos como guionista o productor) sino ése universo de las pequeñas cosas. Cualquier tiempo de espera es óptimo para poner a prueba su creatividad y ejercitar su mente bajo la concisión de los 140 caracteres. El gallego utiliza su cuenta personal de Twitter como un laboratorio de píldoras para pensar o simplemente disfrutar. Algunas más cómicas y otras reveladoras. Editorial Delirio las ha recopilado en un libro A las tres son las 2. Informaciones comprimidas preparadas para estallar en el paladar del lector.

¿Cómo definiría en 140 caracteres su forma tan particular de tuitear?
Más triste es robar.

Si tuviera que volver a escribir su bio de perfil a día de hoy, ¿Cuál sería?
Amigo de mis amigos. Soñador de atardeceres. Miembro orgulloso del Consejo de Seguridad Nuclear. Madre.

¿Cuándo desembarcó en Twitter y qué le atrajo de esta red social?
Hace cuatro años, creo, y no por atracción: Warner me propuso abrir una cuenta que promocionara Buried. Hasta que no la desproveí de toda utilidad, no comencé a disfrutarla

¿Qué le aporta a nivel personal y/o profesional?
Me permite imaginar que soy escuchado y aliviar así toda una serie de carencias relacionadas con una mala lactancia.

¿Le pasó como al 90% de los mortales que se crearon una cuenta, la abandonaron, y al cabo de los meses, o incluso años, supieron de qué iba la historia y la retomaron para quedarse?
Me ha pasado todo eso aun sin irme. Aún me pasa.

¿Pone en práctica el humor que destila en Twitter en la vida ‘real'?
Claro; el proceso es, de hecho, el inverso. En la vida real tampoco le hace gracia a nadie. 'Tuiteo mientras espero. Ocupo tiempos muertos y los remato. Una vez tuiteé desde 1985'

Tuitea con bastante frecuencia ¿Qué ratos emplea para hacerlo (es más de ordenador, móvil...)? ¿Cuál es el sitio más insospechado desde el que ha llegado a tuitear (no vale decir desde un ataúd)?
Tuiteo mientras espero: el metro, al dentista, ver pasar el cadáver de mi enemigo... Casi siempre con una Blackberry. Ocupo tiempos muertos y los remato. Una vez tuiteé desde 1985.

Usted afirma que exagerar la realidad permite verla. Y eso que a veces la realidad es ya bastante exagerada...
El hábito nos convierte en ciegos funcionales. Hay que encontrar un ángulo que haga de nuevo visible lo que siempre estuvo allí.

¿A quién sigue Rodrigo Cortés en Twitter con especial interés?
A varios: @cucutras, @TuiterDeDios, @QueridoAntonio, @SweetTowers, @Canodrama... En general, a quines usan su cuenta como herramienta expresiva; entrar en Twitter por la información es como ir a las ferias por la música. 'Entrar en Twitter por la información es como ir a las ferias por la música'

¿Quién le hace especial ilusión que le siga?
Me haría mucha ilusión que me bloqueara Ambrose Bierce.

¿Algún unfollow confesable que haya ejecutado?
No significan mucho. Un follow o un unfollow no dan la vida o la muerte; a veces te cansas de algo y luego lo echas de menos.

La pregunta de rigor ¿Cómo surgió la idea del libro? ¿Conocía algún precedente?
Fabio de la Flor, de Editorial Delirio, fue el primero en darse cuenta de que estaba usando la cuenta para escribir un libro de tapadillo. Conocíamos, claro, el precedente de Cuerda.

¿Por qué comprar un libro sobre sus tuits cuando podemos seguirle en su timeline? En España funciona mucho lo gratis. ¿Qué le aporta el cambio de soporte (valga la aliteración)?
Se ha hecho una minuciosa criba de fotos de capuchinos. Ha quedado lo que poseyera una cualidad poética propia (no en un sentido lírico, sino como mirada diseccionadora), los antiaforismos, las greguerías, las bombas de mano, las pedradas... La portada es, además, bastante suave, y el libro es tan pequeño que apenas se nota que lees.

¿Para cuándo la película sobre sus tuits? ¿O debería ser corto en plan 140 caracteres? ¿Quién sería el protagonista y cómo se la imagina?
Costaría 250 millones de dólares, la protagonizarían Capa y Puñal y duraría exactamente 32 segundos. Los 140 caracteres serían susurrados. Llegado el momento, mandaría a una india a recoger el Oscar. 'Echo en falta un emoticono que represente a un señor del siglo XIX en bicicleta a punto de caerse'

Twitter ha generado su propio código, en el que muchas veces, si un mensaje lo sacas de contexto o no conoces el entorno, no llega bien el mensaje. No sé cuál es la pregunta.
Pero ibas bien.

¿Qué significa para usted un fav?
No los entiendo, los prohibiría. A mí me gusta mucho prohibir las cosas que no entiendo.

¿Qué ventajas y desventajas encuentra en viajar en el tiempo?
Todo son ventajas, salvo por las desventajas. Siempre he querido, por ejemplo, viajar a 2010. Averiguar qué pensaban, cómo vestían, qué les gustaba comer, qué programas veían en la tele... 'Siempre he querido, por ejemplo, viajar a 2010. Averiguar qué pensaban, cómo vestían'

¿Tuitear desde el baño supone el mayor salto evolutivo desde el invento de la rueda o de las aplicaciones para runners?
No, pero supone un esfuerzo.

¿Echa en falta algún emoticono para expresar algo que no pueda con el lenguaje o con el emoticono de la flamenca o la caca sonriente?
Echo en falta uno que represente a un señor del siglo XIX en bicicleta a punto de caerse. Equivaldría a un: '¡Uuuuy!' y sería así: <[:{\÷

¿Alguna vez ha pensado en complementar sus trabajos y rodar de nuevo Buried en un día de cambio de horario y que a las tres sean las dos en plan final 'giro inesperado'? ¿Cómo se imaginaría el guión de dicho final alternativo?
Sería magnífico: un salto cuántico final que liberara a Paul Conroy de sus propios miedos. Para siempre. Que es, por otro lado, como acaba ahora la película.

¿Alguna vez le han robado más que una hora en algún cambio horario?
Los cambios de hora semestrales siguen un estándar internacional, pero hay saltos entre semana, siempre de madrugada, de los que no se avisa a la población para no alarmarla y que permiten singladuras mucho más largas. Con los consiguientes riesgos.

¿Qué tuit escribirá antes de morir?
Duele.