El Consejo de Ministros de Italia aprobó hoy con un decreto ley aumentar de dos a seis meses el periodo en el que los inmigrantes indocumentados que llegan al país pueden permanecer en los centros de identificación y de expulsión.

"Podremos retener en estos centros a los indocumentados sólo seis meses mientras se procede a su identificación y obtención del permiso para su expatriación", explicó hoy el ministro del Interior, Roberto Maroni.

El titular de Interior justificó el aumento del tiempo de retención al considerar que "a veces la identificación es rápida, pero el procedimiento para obtener el permiso de expatriación es largo y dos meses no son suficientes".

En el proyecto de ley sobre la seguridad que actualmente se encuentra en discusión en el Parlamento, el Gobierno italiano había intentado incluir una enmienda que permitía retener a los inmigrantes sin papeles un máximo de 18 meses en los centros de identificación antes de su expulsión.

Sin embargo, el Gobierno fue derrotado debido al voto contrario de algunos de sus exponentes durante su aprobación en la Cámara de los Diputados y la enmienda tuvo que ser retirada.

Finalmente, con el periodo de seis meses el Ejecutivo ha logrado llegar a un compromiso entre sus miembros y hoy se aprobó como decreto ley, para que pueda entrar en vigor inmediatamente.

Las organizaciones humanitarias han denunciado siempre que los inmigrantes indocumentados que llegan a Italia a través del mar, la mayoría a la isla de Lampedusa, quedan retenidos en el centro de acogida de la isla durante muchos meses en espera de su expulsión o de que se les conceda el estatus de refugiado que han pedido.