La bolsa española sucumbía a las realizaciones de beneficio el jueves a media sesión y se despedía de la cota de los 12.000 puntos tras alcanzar la víspera sus niveles más altos desde agosto de 2008.

Los operadores dijeron que ante la falta de nuevas referencias macroeconómicas, los inversores se limitaban a seguir la estela de las principales plazas europeas, que también se acomodaban en territorio negativo.

El descenso en Madrid estaba liderado por Sol Meliá, que perdía cerca de un 11,5 por ciento tras anunciar una emisión de bonos convertibles por importe máximo de 200 millones de euros.

"Es una noticia negativa. La empresa se reserva amplio margen de maniobra para la futura conversión de los bonos y la operación puede acabar por convertirse en una ampliación de capital", dijo un analista de un broker español.

A las 12:35 horas, el Ibex-35 bajaba un 0,54 por ciento, unos 63 puntos, a 11.970 enteros, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid cedía un 0,44 por ciento a 1.251,11 puntos.

Los pesos pesados de la bolsa española, Telefónica, y Santander frenaban el descenso con retrocesos de entre el 0,3 y el 0,4 por ciento.

Pero BBVA bajaba un 1,1 por ciento y Mapfre, un 2,1 por ciento. También había papel en el sector de construcción, con recortes de cerca del dos por ciento en Ferrovial y en OHL.

Iberia perdía un 1,6 por ciento ante nuevas noticias publicadas de que BA tendrá hasta el 30 de junio de 2010 para decidir qué soluciones se deben poner sobre la mesa para resolver el problema del déficit de su plan de pensiones que, en opinión de Banesto, es el "verdadero talón de Aquiles" de la fusión con Iberia.

El dinero, por su parte, se dirigía hacia algunos valores energéticos, y Gas Natural subía un 0,4 por ciento y Gamesa, un 0,7 por ciento.