Gervasio Deferr dice que es un orgullo y un honor ser el abanderado España

El gimnasta español Gervasio Deferr (Barcelona, 1980) ha asegurado hoy que es un "orgullo y un honor" ser el abanderado de España en los próximos Juegos Olímpicos de Pekín 2008 donde espera conseguir una nueva medalla en su especialidad.

El gimnasta catalán, que se encuentra en Ceuta donde hoy ha recibido el premio al mejor deportista nacional de 2007 en la Gala del Deporte ceutí, ha señalado en rueda de prensa que "ser el abanderado me llena de orgullo teniendo en cuenta que antes lo han sido el Príncipe de Asturias o un mito del deporte como Manuel Estiarte".

En relación a la cita olímpica de Pekín ha afirmado que "he ido a dos Juegos Olímpicos -Atenas'2004 y Sidney'2000-, he tenido la gran suerte de logradas dos medallas de oro en ambos y si no gano en Pekín no me podrán decir que soy un fracasado, es decir, sería genial conseguir otra medalla de oro pero nadie me podrá criticar si no lo logro".

Gervasio Deferr ha asegurado que actualmente "no tengo lesión grave, salvo algún dolor propio de los años que llevo entrenando, por lo que estoy teniendo la tranquilidad de poder entrenar bien y seguido".

En este sentido, ha resaltado que "tuve problemas en las muñecas en el último Mundial, competí con bastante dolor, y me he recuperado bastante bien y no tengo molestias".

Sobre los entrenamientos ha dicho que "son bastante parecidos que para los demás campeonatos porque el trabajo grande ya está hecho y ahora hay que repetir los ejercicios para no tener que pensar en fallar o no, es decir, ahora automatizamos lo que hacemos".

Ha dejado claro que "a mi edad entreno una hora menos, por lo que le dedico cinco horas y media al día cuando antes empleaba seis o seis y media porque la base está trabajada".

Gervasio Deferr competirá este año el 7 de junio en Barcelona en una Copa del Mundo "y luego competiré dos veces más, los Juegos Olímpicos serán la cuarta prueba del año y después no competiré más en este ejercicio de 2008".

Preguntado por si pensó en la retirada en el 2001 cuando sufrió una operación en los dos hombros, el gimnasta ha indicado que "estuve un año sin hacer gimnasia y me planteé si podía llegar al mismo nivel pero la retirada no era una opción".

Ha explicado que "cogí bien el tren tras la operación y no tuve problemas en volver al mismo nivel de antes, aunque la recuperación fuese más larga de lo esperado".