Los detenidos integraban una célula de apoyo a grupos de Al Qaeda del Magreb

La Policía Nacional ha detenido a ocho argelinos presuntos integrantes de una célula islamista relacionada con actividades de adoctrinamiento, sustento económico y apoyo logístico a integrantes de grupos terroristas pertenecientes a la estructura de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).

Según ha informado el Ministerio del Interior, en la operación, que continúa abierta, han sido arrestadas otras diez personas cuya implicación en la célula yihadista investiga la Policía.

Los arrestos de estas ocho personas, llevados a cabo en las provincias de Barcelona, Castellón y Navarra por su presunta implicación en el delito de integración en organización terrorista, se han practicado dentro de la denominada "Operación Submarino", dirigida por el Juzgado Central de Instrucción Número 5 de la Audiencia Nacional.

Los detenidos en la provincia de Castellón son los argelinos Mohamed Bouacha, nacido el 16 de marzo de 1971 en El Harrach; Mohamed Souici, nacido el 14 de noviembre de 1971 en Bouzereah; Youcef Haddallah, nacido el 9 de marzo de 1981 en Argel; Mourad Ait Kaid, nacido el 16 de abril de 1972 en Kouba, y Abdennour Chettah, nacido el 30 de septiembre de 1972 en Kouba.

En Barcelona han sido arrestados Sid Ali Taukoucht, nacido el 19 de agosto de 1968 en Pallat, y Abdelghani Himmouri, nacido el 27-06-1979 en Becha, también ambos argelinos, mientras que en Pamplona ha sido apresado Mustapha Yousfi, nacido el 14 de marzo de 1972 en Oran, Argelia.

La Policía ha detenido además a otras diez personas que mantenían relación directa con diferentes objetivos de la operación y las investigaciones establecerán su grado de participación en las actividades de la célula.

En los registros practicados hasta el momento en los domicilios se han intervenido 7.000 euros en metálico, resguardos de envío de dinero a Argelia, libretas bancarias, numerosos CD y cintas de vídeo, tarjetas telefónicas y diversa documentación.

La Policía Nacional mantiene contacto con otros servicios policiales extranjeros para determinar la implicación de los detenidos en las redes del terrorismo internacional.